El pasado día 6 de abril pasó a la situación de retirado Manuel Cerrudo Moreno. Un nombre más de los muchos que día a día se retiran en la Guardia Civil. Pero Lito no es uno más, es y será siempre un ejemplo de lo que es y debe ser un guardia civil. Una persona trabajadora, honrada, de principios y leal a la Guardia Civil.
Ambos nacimos en Ceuta y en nuestra adolescencia coincidimos en el CAS haciendo piragüismo en una época dorada de este deporte. Nuestro tiempo libre lo dedicábamos a remar y a jugar a distintas actividades en el club.
Ingresó en la Guardia Civil con solo 19 años y tres años más tarde nos reencontramos también en nuestra vida profesional. La fortuna me hizo coincidir con él en mi primer destino en Madrid, donde era casi veterano. Allí pasamos buenos ratos y nos pegamos nuestras buenas risas cuando desde mi mesa de trabajo le lanzaba aviones de papel reivindicando nuestra tierra.
Unos años más tarde ‘Litus’, así lo llamo yo, ascendió a cabo y pasó destinado al puesto de Pelayo (Algeciras). Allí se dejó la piel y le dedicó a su trabajo más tiempo del que la propia Guardia Civil le exigía, porque cuando uno tiene principios se exige mucho más de lo que realmente se nos pide y allí demostró, como en cada uno de los destinos por los que ha pasado, que Manuel Cerrudo, mi ‘LITUS’, nunca será uno más, porque además de ser un profesional como la copa de un pino, es un extraordinario ser humano.
“Manuel Cerrudo nunca será un guardia civil más, es un extraordinario ser humano”
Unos años más tarde pasó destinado a Ceuta y, cosas de la vida, coincidimos nuevamente en lo profesional. Y nada más llegar fuimos compañeros de patrullas y tuvimos la suerte de formar junto a otros compañeros el mejor equipo de trabajo.
Unos años más tarde tomamos caminos distintos dentro de la Comandancia. Efectivamente íbamos cumpliendo años y también años de servicio, pero ‘Litus’ seguía exigiéndose mucho más de lo que se le pedía, porque era y ha sido hasta su jubilación un GUARDIA CIVIL ejemplar.
Hace unos días una persona me decía que ‘Litus’ era un buen profesional y mejor persona. Le respondí que no, que ‘Litus’ era el mejor, no porque los demás sean malos, porque él es especial. Me explico, le dije, tomando un símil del fútbol: Butragueño no es un mal futbolista, pero no lo podemos comparar con Messi y mi ‘Litus’ siempre será el Messi de la Guardia Civil para los que hemos tenido el honor y la suerte de ser su compañero, de compartir momentos profesionales y personales inolvidables.
Ahora toca disfrutar de la familia y de los ‘Litus’ chiquititus. Feliz jubilación y tomando de nuevo un símil futbolístico, siempre seré un ultrasur de mi ‘Litus’.
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