Bomberos ha tenido un servicio especial en la tarde de este miércoles. Acostumbrados a tratar con incendios o accidentes, en esta ocasión su misión ha sido sacar a una cría de gato del motor de un coche. Gracias a su intervención, el gato pudo salir del vehículo con apenas unas quemaduras leves en la cola. “La verdad es que se han portado de escándalo”, explica Jorge, el dueño del coche que de momento se ha quedado con el anima. Explica que todo comenzó cuando iba conduciendo por la avenida España cuando vio al gato desorientado en la carretera. En ese momento se bajó del coche con la idea de apartarlo y que no lo atropellase otro vehículo. “Me paré ahí en medio, salí del coche y me puse a buscarlo”. Sin embargo, tal y como se bajó del coche dejó de ver al animal y se puso a buscarlo, cuando otro conductor le dijo que le pareció verlo meterse en la rueda. En ese intervalo llegó la Policía Local, quien se acercó a Jorge para pedirle explicaciones de por qué estaba estacionado en mitad de la avenida. Jorge le explicó que creía que un gato se había metido en su motor, pero no conseguía hallarlo. La Policía también intervino y tras levantar el capó, con una linterna comenzaron a buscar al pequeño animal por el motor. Finalmente lograron ver el rabo, pero estaba tan asustado que se había escondido en un hueco sin conseguir sacarlo. Tras varios intentos, Jorge decidió llevarlo a un garaje cercano y fue allí cuando un amigo le sugirió llevarlo a Bomberos. “Llamamos al parque de Bomberos y me dijeron que sí, que sin problemas me ayudaban a sacarlo”, relata Jorge a El Faro. Ya en el parque de Bomberos intentaron atraparlo sin éxito, hasta que se les ocurrió usar aire a presión, no para aplicarlo contra el animal, sino para reconducirlo con la idea de el animal que pudiera salir él mismo del coche, como finalmente hizo. Un vez fuera se dieron cuenta de que era una cría, de apenas unos días, muy asustada, pero “muy bueno, se deja agarrar y es muy cariñoso”, comenta Jorge. Ya fuera del vehículo, él mismo lo llevó al veterinario de urgencia, ya que el gato presentaba algunas quemaduras leves en la cola que necesitaban curación. Aunque Jorge se ha comprometido a sufragar los gasto del veterinario, “no me lo puedo quedar”, lamenta, por eso pide ayuda a la ciudadanía para que pueda encontrar un hogar pronto donde puedan darle todo el cariño que este superviviente necesita.