Bomberos ha tenido que sofocar en la mañana de este viernes un incendio provocado en las inmediaciones del
Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes de Ceuta. No es el primer incendio en la zona. Las alertas son continuas ya que es un lugar utilizado para encender fogatas, sobre todo nocturnas, para evitar el frío de dormir al raso o para cocinar.
Hace apenas una semana, El Faro publicaba la intervención de los bomberos en el mismo sector, junto al CETI. ¿La diferencia? La ola de calor que azota el país, y aunque en menor medida, también se nota en la ciudad. Un ingrediente más que se une al peligro que representa de por sí encender fuego en zona de monte, rodeado de árboles y rastrojos, bastante secos a esta altura del año, como se puede ver en la fotografía que ilustra estas líneas. En esta ocasión el SEIS ha actuado de manera rápida, pero ya son varias las ocasiones en las que se ha producido un incendio de esta índole lo que genera malestar entre los vecinos próximos al Jaral porque temen que un incendio de estas características termine alcanzando sus viviendas.
Inseguridad por los asentamientos
Detrás de este tipo de siniestros están los asentamientos de inmigrantes en el entorno del centro de acogida. Allí viven los que han sido expulsados por diversas razones del centro, pero también cocinan aquellos que, por costumbres, comen alimentos preparados a su manera y no el menú que sirve el CETI, por lo que acostumbran a hacer su propia comida fuera del centro. Cualquier descontrol en este tipo de fogatas provoca episodios como el de hoy, como el de hace una semana y como los que se han producido en la zona. Por eso los vecinos de las proximidades exigen que se haga cumplir la ley y que se garantice la seguridad en el lugar, retirando los asentamientos para que no haya más complicaciones ni riesgos como el generado este mismo viernes.