El Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (
SEIS) de la Ciudad Autónoma de Ceuta ha celebrado este miércoles la festividad de su patrón, San Juan de Dios, en la
parroquia del mismo nombre que se encuentra en la barriada de Villajovita. Un gran número de efectivos del Cuerpo, tanto en activo como ya jubilados, se han trasladado hasta el templo con su responsable, Miguel Ángel Ríos, al frente. Lo mismo ha hecho el presidente del
Gobierno local, Juan Vivas, como ya es tradición, en esta ocasión junto al delegado del Gobierno, Rafael García; y el segundo jefe de la Comandancia General de Ceuta, Fernando Rocha y Castilla. También han asistido la consejera de Presidencia, Mabel Deu, y su director general de Emergencias, Víctor Ríos, así como los responsables de Juventud y Fomento en el Ejecutivo local (Lorena Miranda y Alejandro Ramírez) y el líder de la oposición en la Asamblea, Juan Gutiérrez, entre otros socialistas.
El acto central ha consistido en una eucaristía cooficiada por el padre y vicario Francisco Fernández Alcedo.
El patronazgo de San Juan de Dios sobre los bomberos españoles se estableció hace ahora casi 70 años. En el BOE del 2 de julio de 1953 se fundamentó el patronazgo en “un conocido episodio de la abnegada vida del santo” que, a finales del siglo XVI y “con motivo del incendio ocurrido en el Hospital de Granada” se habría lanzado a las llamas “con admirable arrojo” para salvar primero a los enfermos que imploraban socorro. Luego libró el fuego camas, sábanas, cobertores y demás mobiliario y enseres y, por último, siempre según el BOE, “empuñando un hacha, subió a los techos más altos cortando vigas y maderos para impedir la propagación del fuego”. A continuación, “envuelto por las llamas y el humo”, cuando ya se lamentaba por todos su pérdida, “reapareció vivo casi milagrosamente” y solo sus cejas, quemadas, no volvieron a repoblársele, lo que se convirtió en una “marca indeleble del glorioso episodio”.