Antes de comenzar nuestro escrito de opinión quisiera responder al comentario de un ciudadano a colación de la anterior entrega de esta serie de artículos sobre las alegaciones al Plan Hidrológico de Ceuta. Debo indicar que se trata de una persona que expone su razonamiento guardando las formas debidas y que tiene todo su derecho a opinar lo que le parezca oportuno. La decisión de incluir esta escueta respuesta a su comentario tiene que ver con el tono pesimista y hasta derrotista con el que este ciudadano anónimo trata la cuestión del puerto en general. Su opinión es un tanto gris y no parece que enfoque la necesidad de atender los asuntos ambientales ni entienda que los fondos europeos vendrán en gran medida condicionados a esta atención. El señor California (el pseudónimo con el que firma este ciudadano) con su comentario viene a indicar que el muelle de España estará sentenciado a padecer de abandono socioeconómico y que solo servirá junto con el resto de la zona portuaria como muro de contención a la inmigración.
Afirma también, que toda Ceuta es una gran cárcel para inmigrantes y que por lo tanto un museo del mar no interesa ante el mayor interés general por frenar la inmigración. No podemos estar más en desacuerdo con este señor y solo queremos expresarle que ahora, más que nunca, es necesario invertir en cultura y sostenibilidad por muchas razones siendo una de ellas de peso económico para la propia Ceuta, pues pueden estar en juego la asignación de fondos europeos; es necesario apostar por las políticas ambientales y la sostenibilidad y sepa que el museo del mar es el centro neurálgico de las políticas ambientales del puerto en materia de especies y hábitats, contaminación, corrección de los impactos ambientales y calidad de las masas de agua portuarias. Por otra parte, parece del todo lógico no dejar desatendido al corpus social caballa tan necesitado de oferta cultural y de divulgación ambiental y científica abriendo al público una infraestructura científica, ambiental y educativa valiosa y con costes económicos reducidos. No nos parece, a pesar de las actuales circunstancias, que el puerto sea muro de contención de inmigrantes. ¿Qué tipo de ciudad tiene en mente este señor?, una en la que debemos tirar la toalla y supeditarlo todo a las obras de cerramiento y vaciarnos de contenido cultural en línea con el propio título de la colaboración?. En fin, solo esperamos que esta persona pueda recapacitar y se de cuenta de lo que a nuestro entender, es una forma de pensar respetable pero errónea y contraria a los intereses de Ceuta.
Una vez dicho esto, y volviendo a las alegaciones presentadas al EPTI (Esquema Provisional de Temas Importantes), hay que indicar que tres son las fichas que se han preparado por parte de la CHG (Confederación Hidrográfica del Guadalquivir) para atender la mentada EPTI en relación al Plan Hidrológico de Ceuta: F01-Calidad de las Aguas Costeras; F02-Garantía del Suministro y F03-Gestión del Riesgo de Inundación. Abordaremos en sucesivos artículos las alegaciones presentadas por orden de fichas de la uno a la tres. En la introducción a la primera ficha F01, se indica que las fuentes de contaminación puntual más importantes que sufren las aguas costeras son las que provienen de los hogares no conectados, el rechazo de la Desaladora y la actividad del Puerto de Ceuta. Sin embargo, algunas matizaciones caben dentro de este esquema general sobre contaminación de las aguas costeras de Ceuta:
De ninguna manera son los hogares no conectados una de las principales causas de contaminación de las aguas costeras sino una más y no la de mayor importancia a día de hoy en relación al gravísimo problema de las aguas fecales. El problema de las fecales en Ceuta ha sido un asunto que si bien a tenido cierta atención desde hace algunos años con avances importantes en los gobiernos presididos por el actual alcalde nunca se ha querido atajar definitivamente con una política eficaz y valiente apostando por la salud pública y el medio marino y litoral. Sin duda que es la falta de inversión en las infraestructuras de saneamiento la causa principal de los vertidos de aguas sucias al mar cada vez que se produce una avería y principalmente cuando llueve ya que al no existir una red separativa todas las aguas se unen y se producen los colapsos en muchas zonas de Ceuta. Un eterno problema al que no se pone solución; mucho queda por hacer como por ejemplo el soterramiento de una tubería que pueda recoger y llevar las aguas hasta la estación de impulsión de San Amaro. Los principales vertidos al mar se producen en el foso de San Felipe; el aliviadero del Parque del Mediterráneo, la cofradía de pescadores y en el aliviadero de la trasera del mercado central y la zona de Fuentecaballos; en este último lugar las alcantarillas estallan literalmente y todo se inunda de trapos malolientes y de suciedad hedionda que se desparrama por el paseo peatonal. Luego también continúa a cielo abierto la salida de Arcos Quebrados en las cercanías de la frontera con Marruecos y otra en Juan XXIII. De estos aliviaderos el puerto recibe tres de ellos directamente. En cuanto a las infraestructuras que no se quieren acometer están el desarrollo de la mentada red separativa que parece que en una pequeña parte se está mitigando pero que en gran medida las aguas continúan recogiéndose en un solo tipo de conducción. Además a esta falta de separación de las redes de recogida de aguas hay que añadir la ausencia de inversión para poder llevar gran parte de las aguas fecales hasta la EDAR de Santa Catalina. Debido a la orografía ceutí se necesita un “macarrón” de grandes dimensiones que deberá ir soterrado para hacer posible que las aguas superen los problemas orográficos y vayan a parar hasta la estación de impulsión de San Amaro y posteriormente a la EDAR de Santa Catalina. En términos económicos este última obra no requiere grandes inversiones, poco más de un millón de euros, una minucia asumible si valoramos el gran alivio para el medioambiente costero y la salubridad de los ceutíes que en algunas ocasiones se están bañando en aguas contaminadas; también es cierto que las salidas se producen generalmente durante la estación de lluvias y por lo tanto desaparecen cuando comienza la temporada estival con la afluencia a las playas. No obstante, no hay que perder de vista que la materia fecal se va acumulando en el sedimento y por eso en la zona I de explotación portuaria dentro de los diques de protección hay una gran concentración de lodos anóxicos provenientes de estas salidas de aguas fecales sin tratar. Se han tenido que padecer durante la lluviosa primavera de la que hemos disfrutado en Ceuta varias salidas de aguas negras en el paseo de Fuentecaballos en pleno periodo de restricción por causa del Covid-19. Ha sido y continúa siendo una auténtica temeridad mantener las salidas de aguas fecales en el litoral alegremente y en el paseo de Fuentecaballos inundado de inmundicias cada vez que caen cuatro gotas en Ceuta.
Por todo lo comentado, queremos subrayar con toda claridad que la contaminación de nuestro medio costero debido a las aguas fecales provienen del abandono de las infraestructuras de saneamiento y la falta de inversión que mejore las prestaciones de la red de conducciones. La ausencia de una red separativa de recogida de aguas es todavía la causa principal de contaminación de nuestras aguas costeras en los términos antes expuestos. Estas salidas dañan y alteran el ecosistema marino ceutí reduciendo el número de especies y vulgarizando las comunidades biológicas.
Solicitamos que se incluyan estas alegaciones dentro de la EPTI y que las autoridades ambientales estatales (especialmente el MITECO y la Dirección Provincial en Ceuta) tomen las medidas oportunas para solucionar esta lamentable situación de abandono de la ecología y la calidad de las aguas marinas y sus hábitats en el litoral y mar territorial de Ceuta. Se debería también tener en cuenta que la nueva política de la UE será exigente y severa con aquellos países y regiones europeas que no desarrollen políticas de sostenibilidad y abandonen y dañen los ecosistemas.