La sexta edición de la
Carrera Nocturna Montes de Ceuta volvió a tener este sábado un éxito de participación y organización. Unos 800 corredores se lanzaron por los montes ceutíes, en este caso por la zona de
García Aldave, para superar los
20 kilómetros de recorrido de tremenda dureza. Una prueba con la peculiaridad de tener que disputarse de noche, lo que la hace sumamente atractiva. Eso ha hecho este año, como en el resto, que el número de participantes sea bastante elevado y además con mucha calidad entre los corredores.
El ganador de la prueba fue Mohamed Abdeselam 'Billy' que entró en la meta con un tiempo final de 1 hora 18 minutos 49 segundos. El segundo en línea de meta fue Hassan Amar con un tiempo de 1 hora 26 minutos y 55 segundos, mientras que la tercera posición ha sido para Mustafa Mohamed con 1 hora 30 minutos. María Bohórquez se impuso en la modalidad de féminas, después de haber participado en la carrera de bicis, y también haber logrado
el primer puesto. Entró en meta con un tiempo de 1 horas 41 minutos y 48 segundos. Noelia Castillo fue segunda con un tiempo de 1 hora 49 minutos y 37 segundos y tercera Elena López con un tiempo de 1 hora 49 minutos 58 segundos.
La Carrera Nocturna es una de las pruebas con más participantes dentro del calendario deportivo de la ciudad. Suele tener número de similar a la de 'Sierra Bullones' pero no llega a alcanzar a la más numerosa, la 'Cuna de la Legión'. La carrera en sí es sumamente dura y exigente, ya no solo por el desnivel que atraviesan todos los corredores sino porque además lo hacen sin apenas visibilidad. Esto se une a la peligrosidad de tener que correr por el monte con ayuda tan solo de una luz que se sostiene en la cabeza. Todas esas dificultades la han superado los corredores para convertirse en finisher.
No solo los ganadores son los campeones de esta carrera nocturna, todo aquel o aquella que supere los 20 kilómetros y consiga pasar por línea de meta tiene la misma importancia que los primeros clasificados de cada modalidad. Los participantes además tienen que llevar de forma obligatoria luces por delante y luces por detrás y este año como gran novedad la pulsera de inscripción. El corredor que no llevaba pulsera no podía participar y era descalificado en ese momento. La Nocturna de San Urbano se ha convertido en una de las pruebas más importantes de la ciudad, ya no solo por el número de participantes sino por la exigencia que supone recorrer García Aldave sin apenas tener luz.