Venta de estupefacientes, presencia de armas blancas y amenazas a los vecinos son la tónica habitual
Los vecinos de la barriada Bermudo Soriano La Encrucijada se han puesto en pie de guerra contra la ola de delincuencia que están sufriendo en la zona y que ha llevado a que muchos de ellos hayan optado por vender sus viviendas y trasladarse a otros barrios de la ciudad.
De un tiempo a esta parte, el repunte de actos violentos está alarmando a los ciudadanos que demandan una pronta solución. “Es imposible estar en la barriada de día o de noche porque a cualquier hora te encuentras con personas que están delinquiendo”, se lamenta una de las vecinas.
La venta de sustancias estupefacientes está a la orden del día, según han podido constatar los vecinos que denuncian la presencia de personas que incluso ofrecen droga a menores. “Vienen a venderla en la zona y también hay quien se las da a los niños”. Además, algunos de los pequeños traficantes son menores que ofrecen su mercancía impunemente. “Cuando llamamos a la Policía, esconden la droga en los jardines y después vuelven a venderla tranquilamente”, apuntan.
Pero sin duda, el asunto que más preocupa a los vecinos es el relativo a la presencia de armas blancas en la propia barriada. “Hay menores, tanto marroquíes como de otros lugares de la ciudad que llevan cuchillos y machetes en los bolsillos y algunas veces han empujado a las personas que iban a entrar en sus viviendas para meterse en los portones”.
Al parecer podrían no ser las únicas armas ya que algunos de los ciudadanos que residen en Bermudo Soriano han localizado varios casquillos de bala y el propietario de uno de los comercios de la zona fue amenazado con una pistola cuando recriminó a algunas personas que molestaban su negocio.
Además, los vecinos tienen que soportar la presencia de algunos coches que estacionan cerca de los bloques de vivienda y que ponen la música a un elevado volumen. “Necesitamos que haya mayor presencia policial porque esta barriada está totalmente dejada”, añade otra vecina.
Ante el cúmulo de incidencias y la presencia de personas que se refugian en los soportales de los bloques con no demasiadas buenas intenciones, los vecinos demandan el cierre de dichos soportales para sentirse más seguros ante esta ola de delincuencia.
La existencia de varios accesos a la barriada es otro hándicap añadido, ya que los vehículos campan a sus anchas por el descampado de Bermudo Soriano.
Los vecinos han contactado con la ‘Plataforma Ceuta sin violencia’ que nace ante la “necesidad de exigir a nuestros gobernantes locales y nacionales mayores niveles de seguridad en la ciudad”, según reza en su página de facebook.