Son entre cuatro y cinco personas. Constituyen una banda que se está dedicando a intimidar y atracar a marroquíes a los que abordan siempre, de madrugada, en las inmediaciones de la barriada del
Príncipe de Ceuta. Van con cuchillos, pistolas (la Policía sospecha que son simuladas) y perros con los que intimidan a sus víctimas.
Lejos de tratarse de casos aislados, sus acciones van camino de convertirse en la clara visibilización del modus operandi de una organización dedicada específicamente a estas acciones. Entre los marroquíes, sobre todos los
porteadores, cunde el pánico. Son varios los residentes en Castillejos y Rincón que ya han sido víctimas de unos robos en los que nada se escatima: mucho menos la agresión. La forma de proceder de estos individuos es muy radical, golpeando y atacando a las víctimas para hacerse con todo lo que portan encima. En el caso de los porteadores saben que llevan dinero entre sus prendas para la adquisición de bultos. Son el objetivo perfecto para su ataque.
La
Policía Nacional mantiene abiertas investigaciones para dar con ellos. Cuentan con el conocimiento de los episodios ya sufridos, todos ellos coincidentes en sus características. Hace una semana agentes del Subgrupo Operativo Táctico detuvieron a un menor y un adulto por atracar y lesionar a un porteador, usando para ello una pistola simulada y un arma blanca. En este caso no se pudo vincular a los dos detenidos, ya privados de libertad, con una organización de mayor calado.
Muchas de las víctimas no denuncian los atracos sufridos, primero porque son de Marruecos y optan por marcharse de Ceuta tras los ataques; segundo porque tienen miedos ya que son apercibidos de que si colaboran con la Policía para su detención actuarán contra ellos.
Quienes están detrás de estos hechos no dudan en emplear la violencia si con ello consiguen hacerse con todo lo que porten sus víctimas.