Baleària anuncia que este verano mantendrán parte de las medidas sanitarias que ya se adoptaron durante el anterior periodo estival, aunque adaptando estos protocolos de seguridad al nuevo contexto. La naviera, con varias líneas que conectan Ceuta con la Península, ha establecido en todos sus buques una reducción de la capacidad del 10%, una medida extra que, apuntan, "va más allá de las establecidas por las autoridades".
Los ferries, además, disponen tanto de espacios abiertos y ventilados como de camarotes para uso privado de los pasajeros que así lo reserven.
Baleària busca apostar por la digitalización de sus servicios
La naviera continúa además en su intento por promover la digitalización de sus servicios. "Para favorecer la distancia social, Baleària sigue impulsando la reserva y la facturación online, con medidas como el envío de las tarjetas de embarque mediante código QR vía WhatsApp", recuerdan. Este código permite además en algunos ferries el acceso directo a los camarotes sin pasar por la taquilla.
Además del uso obligatorio de la mascarilla a bordo, la naviera sigue proporcionando gel hidroalcohólico y mantiene un plan específico de limpieza, con productos viricidas y desinfectantes certificados. Todos los buques de la naviera incorporan cartelería y vídeos que recuerdan las recomendaciones.
Finalmente, han señalado que la naviera controla diariamente el estado de salud de la tripulación, y que todos sus empleados han recibido formación específica sobre los protocolos de actuación si se detecta un posible caso.
Baleària es líder en el transporte de pasaje y carga en las conexiones con Baleares, y también une Ceuta, Melilla y Canarias con la península. En el ámbito internacional, ofrece servicios en Marruecos, Argelia y el Caribe (entre Estados Unidos y las Bahamas). La compañía apuesta por poner la tecnología al servicio de los clientes en sus smart ships y por el uso del big data para mejorar su eficiencia.
Mentira yo me monto en el barco semanalmente y sobretodo los fines de semana viene el barco hasta la bandera
Francisco, ratifico lo que escribes: lleno hasta la bola los fines de semana. Hace dos domingos, con reservas de coche, casi me quedo fuera y despues no había donde sentarse dos adultos