No dijo nada, y simplemente desapareció. Hace once días que nadie encuentra a Aymen Azzam, pero su familia no para de buscarlo. Este joven de 20 años dejó su ciudad natal, Safí (Marruecos), el día 18 de mayo, coincidiendo con la segunda jornada en la que miles de personas accedieron a Ceuta desde el país vecino. Y ahora, los suyos sospechan que él también se encuentra en la ciudad. O, al menos, que en algún momento lo intentó. Su sueño siempre fue llegar a Europa, y así lo recuerda su hermano en una conversación telefónica con El Faro de Ceuta. "Era de lo que solía hablar con sus amigos", rememora, "todos querían salir de Marruecos". Tan solo una hora antes de la llamada con este periódico, su hermano acababa de llegar a Castillejos siguiendo la pista de Aymen. Dice haber intentado encontrarle por todo Marruecos, y también enseña una denuncia que presentó a las autoridades locales tras su desaparición. Ahora, ha llegado a la conclusión de que lo más sencillo será acercarse él mismo a la frontera. De esta forma, espera encontrar alguna pista que le ayude a dar con el paradero de su hermano, a quien echa en falta. La denuncia presentada por sus familiares tras la desaparición de Aymen. Asegura haber intentado contactar con las autoridades españolas para confirmar si su hermano había llegado o no a nuestro país o si, al menos, alguien podía indicarle dónde se encontraba. Pero el idioma fue una barrera, lamenta, de la que no pudo sacar nada en claro. La mayoría de edad de Aymen refuerza la hipótesis de que, en caso de haber sido localizado en España, fuese devuelto a Marruecos en los últimos días. Sin embargo, también es posible que haya logrado quedarse en nuestro país de alguna manera, o que forme parte de aquellos nacionales de los que Mohamed VI no ha aceptado el retorno.