La había escondido en un habitáculo específicamente preparado para servir de ocultación
de la droga. Y así pretendía, con el mejor camuflaje ideado, pasar los casi 100 kilos de hachís de Ceuta a la Península conduciendo una ambulancia con la que iba a despistar a la Benemérita. O eso es lo que pretendía. No lo logró.
La Guardia Civil pondrá a disposición judicial al vecino de Ceuta de 32 años por un delito contra la salud pública. También ha intervenido el
vehículo de emergencias que tenía esta persona que hacía servicios mediante contrato. Es decir, se trataba de un autónomo al que se le contrataba para estos traslados asociados a incidencias médicas y tratamientos.
A primera hora de la mañana agentes de la Compañía Fiscal y de
Fronteras conjuntamente con el Grupo Cinológico
han actuado sobre este vehículo, modelo Mercedes Sprinter, matrícula nacional, en donde se escondía la droga tras generar sospechas entre el turno operativo.
El camuflaje perfecto, ¿usado con anterioridad?
¿Y dónde la guardaba? Tras inspeccionar al detalle el vehículo se localizó la droga en el chasis interior. Un escondite perfecto para que no la vieran y además protegido por el hecho de que era una ambulancia la usada para el pase con lo que se pensaba que no iba a levantar sospechas, pero sí, las levantó.
Una vez registrada se halló la sustancia, casi 100 kilos de hachís, en concreto 92. El lote de narcóticos ha quedado intervenido y será trasladado al área de sanidad para su análisis y posterior informe
al juzgado. La ambulancia queda decomisada y el detenido ya está en los calabozos a la espera de que sea puesto a disposición judicial.
¿Era el único pase? Es el que ha abortado la Benemérita pero quedará iniciar la oportuna investigación por si se estaba ante un modo de pase explotado con anterioridad.