La red desarticulada este martes por la
Guardia Civil de Ceuta, en el marco de
la Operación Astillero, se ha saldado con 6 detenidos, varias embarcaciones intervenidas, así como motores fueraborda y abundante documentación. La operatividad de la organización tenía un doble eje: no solo pasaban a los inmigrantes a la Península sino que también les facilitaban antes la documentación falsa para cruzar la frontera del Tarajal. Esta madrugada, bajo la dirección del
Juzgado de Instrucción número 5, se ha procedido a la entrada y registro en viviendas del
Sarchal y Pasaje Recreo además de en varios cuartillos del puerto pesquero. La operación sigue abierta, pero con esta fase estelar se ha conseguido lo principal: las detenciones y la intervención del material bajo análisis que viene a demostrar el funcionamiento de esta red que se dedicaba al pase de inmigrantes marroquíes, por lo que tenía enlaces entre Ceuta y Marruecos para garantizar la entrada y el pase. Unidades de Información llevaban trabajando en este asunto, lo que ha dado pie al hallazgo de lo que presumían encontrar: dispositivos telefónicos, numerosa documentación de interés para la investigación, 7 motores fueraborda, más de 200 litros de combustible, embarcaciones neumáticas y chalecos salvavidas de los utilizados para pertrechar a los inmigrantes con intención de trasladarlos a la Península. Estos son los datos oficiales aportado por la Guardia Civil en un comunicado.
Dos indocumentados preparados
Cuando los agentes actuaron se encontraron a dos indocumentados que estarían preparados para un futuro pase. El modus operandi consistía en la captación de los marroquíes, después su preparación para lo que le facilitaban documentaciones falsas, tanto pasaportes europeos como DNI. Así la red cumplía su función de permitir la entrada por los pasos fronterizos sin despertar sospechas. Después llegaba el segundo compromiso: cruzar a la Península, para ello la red ofrecía las embarcaciones neumáticas con las que partían de distintos puntos de la costa de Ceuta. El material encontrado ha servido para que los investigadores puedan aportar la prueba necesaria en el juzgado. La operación, protegida bajo secreto de sumario, sigue abierta por lo que puede haber nuevas detenciones.