Arria la Carná

IMPORTANTE:  «severo» no es lo mismo que «grave»La Fundación del Español Urgente explica que usar severo con el significado de 'grave' o 'serio' es un calco inapropiado de la palabra inglesa severe, ya que en español, se aplica a personas o cosas con el sentido de 'adusto', 'rígido', 'riguroso', “serio”…
Así, la Fundéu señala como ejemplo lo siguiente:  «La empresa sufrió un severo recorte de gastos» No es correcto. Lo recomendable sería decir: «La empresa sufrió un serio recorte de gastos» y en cualquier caso, usar el entrecomillado para dicho término  siempre que no sirva para calificar el carácter de las personas.
El carácter riguroso que se presupone a los militares, adusto en su “modus vivendi” y ciertamente “severo” en su trato, se relaja demasiado en esta pequeña ciudad que –aunque no se lo crean- dejó de ser Presidio hace ya un siglo (exactamente, su clausura se publica en 1910) ..., y digo bien, se relaja en su condición de Estamento, cuya representatividad recae en manos de la Comandancia General, con determinadas acciones que,  cuando menos, desconciertan al visitante y a estas alturas, cansan al ciudadano, como el repetitivo acto del Arriado de Bandera  que jueves si y jueves también, ha pasado de ser un reconocimiento de propósito pannacionalista (en nuestro caso particular bien visto dada la sensiblería acostumbrada) a convertirse en una cansina demostración del ego de los “arriadores” que esperan ver su foto en la prensa y poco más…
Como ciudadano me molestan los actos del  Arriado porque provocan inconvenientes en el tráfico rodado que afectan al municipio en su totalidad (dada los particularismos propios de la red kilométrica de la ciudad) desde las avenidas céntricas, totalmente colapsadas, hasta las del extrarradio que, por desgracia, no encuentran otra salida vial. Y me molestan como caballa porque, entiendo, que no por arriar más veces la enseña nacional soy más español y, en cualquier caso, el acto en sí,  ha dejado de ser un  referente emotivo para los ceutíes desde hace algún tiempo para pasar a ser tan sólo un “posado fotográfico” y con vistas al turista de turno de los muchos “miles que nos visitan” según estadísticas de los organismos competentes…
Las banderas deberán izarse luego de la salida del sol y arriarse antes de la puesta del sol. Nunca deberá dejarse la bandera izada durante la noche, por respeto,  ya que esto solo ocurre en casos de conflicto bélico (creo), pero me resulta todo un acto tan del Estamento Militar que no encuentro lugar para que estemos cada jueves con un atasco circulatorio.
En esta bendita ciudad, no tenemos bastante con el Sábado Legionario -emotivo hasta las trancas- pero que una vez visto, vistos todos los sábados y todos los legionarios que quieran.
No tenemos bastante con el cañonazo de las 12.00, que te pone de los nervios cuando miras el reloj y te dices (como si no lo supieras ya) ¡¡coooño, las doce!!. No tenemos bastante con  los actos institucionales propios (llámense Santos, Patronos, Condecoraciones..) de Artillería, Caballería Regulares, Ingenieros o la Legión, a los que solemos acudir por familiaridad, amistad, tradición o simpatías. Que va, ni mucho menos…, aquí además, cada jueves hay que sufrir “un atasco de condicionamientos patrios” para el “regusto” de algunos y el disgusto de muchos que tenemos mejores cosas que hacer.
Amo a mi bandera y no necesito arriarla cada jueves para ello. Amo a mi bandera, como amo a mi pais y no por ello tengo que estar todo el día enseñando el dni.
Amo a mi bandera y, precisamente por ello, me molesta que se use como si fuera de unos y no de otros, como si fueran más españoles aquellos que se designan (quien sabe como) para el acto en sí que los que nos quejamos por tanta “película”. Amo a mi bandera y porque la amo, creo que se están pasando con actos que lo único que provocan es una reacción –tarde o temprano- del ciudadano que también la ama pero que está hasta las narices de que le desvíen y lo metan en un atasco para gusto y disgusto de todos.
El Acto del Arriado de la bandera debería ser algo más íntimo para los militares por cuanto se sucede en la propia Comandancia General, mientras que si quisieran hacerlo público, y con público, tendrían que arriar cada tarde la Enseña Nacional que ondea en el Parque Juan Carlos I (terrenos feriales) donde “duerme a oscuras y tan sola, que dormida en mi alma otea y baila con las mareas  al despertar de sus olas, que por sentirse española al asta aferrada ondea”.
De lo contrario, se corre el riesgo de encontrarse, un año de estos, con esa frase tan nuestra que dice eso de “arría la carná”, que viene a ser lo mismo que un “najaté”, “jervo” o un “llevate la bandera a tu casa, cohone” .acto hasta que no la paseen por todo el camposanto al menos dos vueltas.