De nuevo, los
Bomberos fueron recibidos en
Arcos Quebrados a pedradas. Cerca de las 17:30 horas recibieron el aviso de que un vehículo estaba ardiendo en esta zona de Ceuta, un lugar donde este tipo de prácticas ya se ha vuelto habitual. Se activó el protocolo de acompañamiento y la
Policía Local escoltó a la dotación del SEIS que se dirigía hasta el punto exacto. Sin embargo, una vez allí, y aún a plena luz del día, no era un coche lo que ardía, sino un vertedero de chatarra, posiblemente provocado para poder apedrear a los efectivos que acudieron a sofocarlo. Piedras de grandes dimensiones dieron la bienvenida a los bomberos, que pese a la hostilidad, cumplieron con su labor de extinguir las llamas de la chatarra incendiada. De poco sirvió la escolta, ya que desde las zonas más altas les llegó el aluvión de piedras a ambos cuerpos de emergencia. Una situación que ya ha sido denunciada, en reiteradas ocasiones, por estos profesionales, que ven incrementada la peligrosidad en estos servicios.
Semana tensa
La semana inició con un violento episodio, esta vez en el Príncipe. Entre seis y siete encapuchados ejecutaron continuas emboscadas a las fuerzas de seguridad con un único fin: apedrearles. Llegaron a construir barricadas de contenedores a los que prendían fuego en distintos puntos del barrio como el zoco o las inmediaciones del cafetín Mojito. Así lograron un mar de llamas buscando la manera de rodear a los agentes desplazados para atentar contra ellos. En total se han quemado 10 contenedores. Durante toda la madrugada del lunes, tanto los Bomberos como la Policía no cesaron en recibir avisos de alertas girados desde el 112. Llamadas que advertían de quemas de depósitos. La experiencia de los agentes ya apuntaba a que se estaba gestando una emboscada como finalmente sucedió en torno a las 5:00 horas. Hasta ese momento se había alertado de incendios aleatorios de uno o dos contenedores, hasta que en ese momento se toparon con el aviso de más fuegos.