El
Gobierno de Ceuta ha movilizado todos los resortes a su alcance para “revertir” la valoración desfavorable que la Dirección General de Coordinación Universitaria de la Junta de Andalucía ha emitido sobre la propuesta de la
UGR para
implantar dos nuevas titulaciones de posgrado en la ciudad autónoma. Uno versaría sobre Educación Digital y Emprendimiento (MEDE) y otro de Gestión de Salud Pública. El Ejecutivo de Juanma Moreno está dispuesto a reconsiderar su postura si se mejoran y corrigen las condiciones en las que se había planteado de entrada. El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, prevé reunirse según las fuentes consultadas “lo antes posible” con el rector de la institución nazarí, Pedro Mercado, y ya ha sentado las bases para constituir un “grupo de trabajo” en el que también participen el Ejecutivo de Melilla y el Ministerio de Universidades con el fin de resolver el fondo de la ecuación, que sobre todo es cuestión de financiación. La UGR dedica a sus campus “singulares” de las ciudades autónomas más de 20 millones de euros al año, pero el Gobierno central, que es el competente en la materia en Ceuta y Melilla, solamente aporta algo más de nueve, cantidad que se baraja elevar en 2024 si hay nuevos Presupuestos Generales del Estado casi un 20%.
Los números no cuadran para la Junta de Andalucía
La localidad hermana norteafricana pone cuatro y la administración caballa hizo una inversión mayúscula en infraestructuras para rehabilitar el antiguo acuartelamiento del Teniente Ruiz, pero los números no cuadran para la Junta de Andalucía, aunque su consejero competente está dispuesto a reconsiderar el hasta aquí hemos llegado si se mejora la propuesta inicial. Los de Juanma Moreno han aguantado hasta ahora el tirón, pero cuando la Universidad de Granada ha propuesto ampliar titulaciones en Ceuta y
Melilla a partir de 2025 ha dicho basta en la primera y ha dado carrete a la segunda (con Podología y dos másteres más). Los de Imbroda aportan algo más de 4 millones cada ejercicio en su apuesta para ser una “ciudad universitaria” merecedora de tal nombre. El veredicto provisional (susceptible de alegaciones) de la Junta ha sentado como un tiro a la UGR en general y las facultades de Ceuta en particular, pero el Gobierno de Vivas considera “prioritario” el asunto y con su presidente a la cabeza ha pactado crear un foro multilateral en el que el Ministerio de Universidades (competente), la institución nazarí y las dos Ciudades coordinen esfuerzos.
Objetivos fundamentales marcados
Tres son los objetivos fundamentales que tiene el Ejecutivo ceutí: mejorar la oferta formativa de estudios superiores para el conjunto de los caballas; seguir generando capital humano para fortalecer el tránsito hacia un modelo económico “verde, azul y digital”; y “conseguir el conocimiento sea otra fuente de empleo y riqueza en la ciudad”. En paralelo, la Consejería de Educación y Cultura que lidera Pilar Orozco va a redoblar su empeño en intentar dar solución a otras necesidades de Ceuta como ofertar mayores y mejores condiciones de alojamiento al estudiantado universitario, clave para ampliar también la oferta de titulaciones de grado local.