Álvarez no está “disgustado” tras fallar Rajoy en la investidura

El líder sindical señala que el problema no es quién sea jefe del Gobierno sino las políticas que se apliquen. Está satisfecho de la visita a Ceuta para estar presente en la imposición de la Medalla de la Autonomía

El secretario general de UGT, José María Álvarez, dijo sentirse muy satisfecho de su visita a nuestra ciudad con motivo de los actos del Día de Ceuta donde su central sindical va a recibir la Medalla de la Autonomía. Sobre este particular manifestó que los ciudadanos deben saber que sin el papel que han jugado los sindicatos en los últimos 100 años "difícilmente tendríamos una sociedad como la actual, que no es justa, pero que tiende a ello".

En particular quiso destacar que tenía una deuda pendiente con los ugetistas ceutíes, que le apoyaron de manera importante durante el Congreso que le llevó a ser el sucesor de Cándido Méndez. Ya en una ocasión tuvo que aplazar una visita que tenía prevista.

En clave nacional, como es lógico, el debate de investidura ocupó gran parte de la intervención de José María Álvarez, que estuvo acompañado en la rueda de prensa ofrecida a los medios de comunicación por el secretario general de la UGT ceutí, Juan Carlos Pérez.

El líder del sindicato reconoció que "no se sentía nada triste" porque hubiera fracasado Rajoy en su investidura en el Congreso de los Diputados, "porque la mayoría de los ciudadanos de este país han apostado claramente por reformas cuando acudieron a votar tanto en el mes de diciembre del año pasado como en junio de éste y en el programa firmado por el Partido Popular y Ciudadanos pocas soluciones he observado a las verdaderas necesidades que tienen los españoles".

Desde su punto de vista, lo importante no es quien sea el presidente del Gobierno sino cuáles son las políticas que se van a aplicar, "que haya un programa de Gobierno que responda a las dificultades por las que se atraviesa".

Apostó porque hace unos meses presentaron 20 propuestas para mejorar la vida de los ciudadanos en España y que hay una mayoría de diputados que aplaudieron estas medidas. Entiende que no es una cuestión de urgencia el que haya un Gobierno, "sino que ese Ejecutivo responda con soluciones, no con las medidas que ha estado aplicando el Partido Popular en estos últimos cuatro años".

También fue preguntado sobre los cambios que había introducido en su sindicato en estos seis meses que lleva al frente del mismo y destacó, por encima de todo, que se han constituido tres Federaciones de las seis que existían, "con lo cual nos vamos a convertir en una organización mucho más ágil, pero también hemos de tener en cuenta que somos una organización con 128 años de historia y por tanto los cambios no se pueden hacer en 24 horas". Apuestaclaramente por la transparencia y quiere que antes de fin de año todos los convenios que tenga su sindicato con las administraciones públicas sean recogidos en la página web de la central sindical, de manera que puedan ser consultadas por los ciudadanos.

Le da mucha importancia a las cuotas que pagan los militantes de la formación y quiere que todos ellos sepan que parte va dirigida a los servicios jurídicos y la que puede ir a la estructura, aunque defendió de manera importante que haya subvenciones públicas para el mantenimiento de las centrales sindicales por el papel que juegan en la sociedad española.

Álvarez tuvo que pasar la aduana andando

Uno de los problemas que tuvo el secretario general de UGT, José María Álvarez, para no venir a nuestra ciudad hace varios meses fue, desde luego, la falta de helicóptero y las malas comunicaciones para estar unas horas y marcharse. En esta ocasión, se desplazó por Tánger y desde allí le recogieron sus compañeros de la Unión General de Trabajadores de nuestra ciudad. Sin embargo, la rueda de prensa que estaba prevista a las 19 horas en la sede del sindicato se tuvo que retrasar unos minutos porque Álvarez había tenido dificultades para pasar la Aduana del Tarajal. Vamos, iban con tiempo de sobra, pero como los tapones se repiten y se repiten, pues al final tuvieron que tomar la decisión de pasar la Aduana marroquí y la española andando y coger un taxi en la rotonda que les llevara hasta el hotel. Toda la estructura de la UGT a nivel nacional que se ha desplazado a Ceuta y tuvieron la oportunidad de vivir ayer lo que es el caos más absoluto en una de las aduanas europeas que tiene la UE en África. Una buena oportunidad para explicarlo en Madrid a su regreso a la capital. Quizá así sea el altavoz oportuno reclamado.