Llevamos años denunciando la desgana de los mandos del Cuerpo Nacional de Policía para asumir las competencias que la Ley de Fuerzas de Seguridad del Estado les otorga. Se trata de que tomen las riendas de sus competencias para que la Guardia Civil pueda realizar las suyas con total satisfacción. Y no lo hacemos de forma caprichosa, lo hacemos porque nos preocupa la seguridad de todos los ceutíes.
La
Guardia Civil tiene como misión el resguardo fiscal en los puertos, la seguridad e impermeabilización del perímetro fronterizo, la vigilancia de las costas y las carreteras nacionales de Ceuta. Esa es la misión de la Guardia Civil y para esas misiones, el Ministerio del Interior ha dotado a la Guardia Civil de una plantilla en Ceuta. Además debe cooperar fuera de su demarcación para auxiliar al Cuerpo Nacional de Policía en caso de necesidad. Esta obviedad la entiende cualquier ciudadano sin necesidad de hacer un máster. Sin embargo, en esta noble y marinera, ocurre algo impensable en cualquier otro lugar del país.
Ocurre que la Guardia Civil asume competencias del
Cuerpo Nacional de Policía fuera del perímetro de la Aduana del Tarajal -reiteramos, que es competencia del Cuerpo Nacional de Policía- y, además, los mandos de dicho Cuerpo no ordenan socorrer a los guardias civiles cuando miles de ciudadanos tratan de acceder a la zona del resguardo fiscal, competencia de la Guardia Civil. Esto ocurre en esta bendita tierra todos los días y nadie hace nada para impedirlo.
"En la última avalancha los guardias civiles se quedaron solos, no hubo presencia de ningún miembro del CNP”
Nadie es capaz de poner orden para que cada Cuerpo asuma sus competencias, porque asumir competencias propias derivará en seguridad ciudadana para todos los ciudadanos de Ceuta.
La acumulación de personas en las inmediaciones de la Aduana del Tarajal no es una sorpresa para ningún representante político o policial de nuestra ciudad. Es habitual y previsible y, por tanto, no se puede justificar la falta de funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía para garantizar la seguridad de los ciudadanos que pasean o traten de pasar mercancía hacia Marruecos. Hacer una selección de los servicios que les puede o no interesar a los jefes del Cuerpo Nacional de Policía es hacer una dejadez de funciones inadmisible, aunque consentida. Dejadez que pone en evidencia la capacidad de los responsables policiales. Desconocemos si carecen de plantilla, los motivos que pueden tener para no realizar un servicio que les compete. Lo desconocemos, pero su competencia es resolver los problemas y asumir los servicios que le corresponden por ley.
En la última avalancha -igual en estos momentos hay otra-, los guardias civiles se encontraron solos. No hubo presencia de ningún miembro del Cuerpo Nacional de Policía para cooperar y garantizar la seguridad de estas personas. Por tanto, no es ninguna imprudencia decir que se intentó “escurrir el bulto” como venimos diciendo en la cabecera del artículo. También en la cabecera hacemos hincapié en la descoordinación y lo hacemos porque nos encontramos con la sorpresa de observar a unos compañeros en la zona alta sin que nos comunicaran que estaban allí para impedir -nos imaginamos- que nos apedrearan desde arriba. Que nadie piense que es un hecho puntual, porque viene ocurriendo frecuentemente.
"Los mandos del CNP no ordenan socorrer a los guardias civiles cuando miles de ciudadanos tratar de acceder al resguardo fiscal"
Sin embargo ustedes -mandos policiales- no tienen la obligación de coordinar a los Cuerpos de Seguridad del Estado, esa responsabilidad la debe asumir la Delegación del Gobierno y la delegada debe pedir explicaciones al jefe del Cuerpo Nacional de Policía de los motivos que impidieron desplegar funcionarios para auxiliar y garantizar la seguridad de ciudadanos y guardias civiles y, por supuesto, de los motivos que dieron lugar a tanta descoordinación.
Hablábamos de asumir competencias para que la Guardia Civil pueda realizar las suyas con total satisfacción. Y AEGC lo hace por responsabilidad, porque atender la seguridad ciudadana en la Aduana del Tarajal merma nuestra capacidad de respuesta ante un intento de salto al perímetro fronterizo y, por supuesto, resta efectivos para la vigilancia de costa y las carreteras que son competencia de la Guardia Civil. Por tanto, no se trata de escurrir el bulto, de no ayudar a nuestro compañeros del Cuerpo Nacional de policía, se trata de que cada uno realice las funciones que tiene encomendadas y, por supuesto, ayudarnos en caso de necesidad como debe y tiene que ser.
No queremos dejar de pasar la ocasión para felicitar y agradecer a nuestros compañeros del Cuerpo Nacional de Policía su profesionalidad, colaboración y dedicación. Sabemos que sois unos extraordinarios profesionales y que hacéis el trabajo que os ordenan con lealtad y honestidad. Y, por supuesto, informaros de que esta crítica no va dirigida a los que tenemos la responsabilidad de obedecer. Que no traten de confundiros, ya lo hicieron otras veces.