“Las obras de la futura Comandancia de la Benemérita sin fecha de inicio”. Este titular publicado esta semana por El Faro ha caído como un jarro de agua fría en la Asociación Española de la Guardia Civil (AEGC) cuyos representantes en Ceuta recelan del ‘choteo’ ejercido por el ministro del Interior Fernando Grande-Marlaska.
Más de 20 años lleva esperando el Instituto Armado una casa cuartel nueva que sirva de sede digna para quienes componen las filas de esta fuerza de seguridad. Hasta la fecha todo lo anunciado y por tanto escrito ha caído en saco roto. Es, consideran, una auténtica burla a los guardias.
Una burla y también un menosprecio a los agentes. Hay unidades que tienen que trabajar en espacios que no cumplen las mínimas normas en materia de riesgos laborales. Es el caso de Policía Judicial, ubicada en un sótano, sin ventilación y cuyo acceso es a través de unas escaleras empinadas imposibles para quienes presentan alguna movilidad reducida.
Las obras que se van haciendo tienen una consecuencia directa: lo que se amplía en un lado se tiene que quitar de otro y quienes son los paganos de esta situación son los propios guardias ya que se eliminan pabellones para hacer oficinas. Algo sangrante con la merma de vivienda que hay en la ciudad.
Una mirada años atrás sitúa la que iba a ser futura Comandancia frente a la actual. Se dijo por aquel entonces que podrían estar unidas ambas sedes a través de una especie de túnel. De aquel proyecto se pasó a la edificación en San Amaro y de la barriada al proyecto de las Heras que llevó a una demolición del antiguo Parque de Artillería por urgencia en el año 2008 sin que 15 años después se haya colocado una sola piedra en el lugar.
Hoy la novedad es que no la hay. Después de haberse incluido su construcción en el primer plan de infraestructuras de seguridad con un presupuesto de 11 millones de euros ha pasado a no tener fecha de inicio.
Se anunció, de hecho, que en 2023 comenzarían las actuaciones en el antiguo solar. Todo incierto. Ahora la construcción se ha postergado al segundo plan de infraestructuras y el gasto se eleva a 43 millones. En fechas supone esperar más años, al menos tres más. Para la AEGC es una vergüenza todo lo que está pasando. En el discurso ofrecido por el coronel Gabriel Domínguez con motivo de la Patrona del Cuerpo esta misma semana ya se dejó claro el malestar existente, pero la asociación va más allá. Crítica como siempre ha sido con las deficientes infraestructuras que tienen que soportar los agentes de la Benemérita, reclama explicaciones. El director general del Cuerpo, Leonardo Marcos, no las dio porque ni siquiera habló del proyecto.
La casa cuartel de Hadú ha sido parcheada, no dispone de pabellones suficientes, las infraestructuras son antiguas y se mantiene en pie a fuerza de remiendos erigiéndose de hecho en una de las sedes más antiguas que mantiene el Ministerio del Interior en toda España a pesar de que Ceuta es un punto estratégico.
Antes de 2026 no habrá novedad. Es la respuesta que da el Gobierno a una Guardia Civil que ha visto ya anuncios de todos los colores tanto con populares como con socialistas en el poder.
En este periodo solo ha habido anuncios pero nada se ha ejecutado y el solar de las Heras sigue sirviendo para la recogida de los feriantes antes de las fiestas patronales y para cercar el pabellón que se va cayendo a pedazos sin que se intervenga para proteger este bien patrimonial.
Según difundió Interior en el año 2021 la nueva Comandancia albergará diversos edificios (dependencias oficiales, intervención de armas, ...) un área residencial de 113 viviendas de 1 y 3 dormitorios, así como aparcamientos para ambas dotaciones. Todo eso dijo, pero ver los guardias civiles no ven nada y ya ni se creen los anuncios y pronósticos de mejora. Siguen los pabellones insuficientes que se convierten en viviendas improvisadas para algunos agentes sin reunir las mínimas condiciones. Siguen los departamentos en donde trabajan los grupos de investigación sin siquiera cumplir las mínimas normas en cuanto a accesibilidad. Y se continúa con una Comandancia en la que cada celebración del Pilar hay que hacer malabarismos para que se pueda realizar la formación.
Todo esto lo vio esta semana el director general como lo vieron quienes le precedieron y lo conoce a la perfección el Ministerio del Interior. Ni siquiera se cumplen las normas mínimas de habitabilidad en una Comandancia que ha ido adaptándose a los tiempos como ha podido aspirando a un traslado que nunca se ejecutó.
Los distintos gobiernos del PP y PSOE anunciaron mejoras para los guardias civiles que consistían, sobre todo, en cambiar la Comandancia. Aunque algunas voces son contrarias al traslado de Hadú e incluso los vecinos recogieron firmas para impedirlo, el propósito de Interior era construir una nueva infraestructura en el antiguo parque de Artillería que estaría dotada con aparcamientos y viviendas suficientes. De esto nada se ha hecho y el único reconocimiento oficial es que hasta 2026 no habrá nada de lo que hablar.
Para la AEGC lo que ha hecho Interior es burlarse de los guardias toda vez que ni siquiera se da una explicación convincente no ya del retraso sino de la confirmación de que ya nada se hará en estos próximos años. El asunto es de tanta importancia que la AEGC no entiendo cómo ni siquiera existen reuniones con los guardias civiles para trasladarles la realidad de lo que está pasando, terminan enterándose por los medios de comunicación de noticias tan sorprendentes como la que ahora se ha trasladado.
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