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Además, después de no haber superado la revisión ha seguido prestando servicio
La única ambulancia medicalizada de la que dispone, en estos momentos, el 061 no ha pasado la inspección que la Consejería de Sanidad, Servicios Sociales, Menores e Igualdad realiza cada año, dentro de las competencias que tiene asignadas el área autonómica a este respecto.
Según ha podido conocer esta redacción, la mencionada inspección se efectuó hace un par de días y los técnicos de la Consejería encargados de la misma realizaron un informe negativo. Sin embargo, esa ambulancia medicalizada no fue retirada de inmediato por parte del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria, sino que, como mínimo durante la jornada del martes y del miércoles ha seguido funcionado cada vez que ha hecho falta salir para atender una urgencia donde el desplazamiento se hace necesario.
El servicio que presta el 061 está bajo un convenio que tiene el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria con la empresa de ambulancias SSG. De esta manera, la obligación por parte de SSG es no solamente facilitar los vehículos, sino también los técnicos y conductores, mientras que plantilla funcionarial perteneciente al Ingesa son los médicos y diplomados en Enfermería.
Hasta hace unos meses, se disponía en el 061 de una ambulancia medicalizada, preparada con todos los detalles establecidos por la ley. Sin embargo, la misma sufrió una avería y desde hace meses se encuentra en la Península reparándose. La que se puso en funcionamiento es otra ambulancia de las mismas características a la que se trasladó todo el aparataje de la que se encontraba estropeada.
Problemas
Sin embargo, no solamente el problema se centra en que esta ambulancia no haya pasado la inspección de la Consejería de Sanidad, Servicios Sociales, Menores e Igualdad, sino que, por lo visto, hasta los propios trabajadores de SSG no se sienten seguros ni conduciendo las ambulancias, porque observan muchos problemas mecánicos e incluso que las ruedas están muy gastadas.
Algunos trabajadores de este servicio han manifestado a esta redacción que “nosotros normalmente vamos a mucha velocidad cuando nos trasladamos a un lugar donde somos requeridos, ya que estamos hablando de que el tiempo puede ser esencial para salvar una vida. Y como es lógico necesitamos de seguridad mecánica para que no existan problemas y en realidad nos estamos jugando la vida. Luego, cuando ya nos trasladamos con un enfermo hasta el Hospital Universitario ya vamos más despacio porque normalmente el objetivo es estabilizar a esa persona”.
Otra de las quejas es la calidad del material fungible que se lleva en la ambulancia y que es suministrado por la empresa SSG, según el convenio actualmente en vigor. Con anterioridad, era el propio Ingesa el que se encargaba de proporcionar este material concreto, pero desde que produjo la última adjudicación es la concesionaria la que tiene la responsabilidad. Por supuesto, reconocen que el mencionado material fungible cumple con todas las condiciones obligadas por la Unión Europea, pero tanto médicos con diplomados en Enfermería denotan que la calidad deja que desear en relación con el que antes utilizaban y que era comprado directamente por el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria.
Muchos de estos profesionales tienen muy claro que la culpa no es solamente de la empresa concesionaria SSG, sino también del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria, porque como un centro oficial que tiene un convenio con una empresa privada tiene en su poder los suficientes mecanismos legales, tal y como figuran en los pliegos de condiciones que han regido durante la licitación, para imponer multas a la mencionada empresa cuando se denotan los incumplimientos. Parece ser que están hartos de elevar quejas a sus superiores en el Ingesa y no les hacen caso en relación con las distintas denuncias.
Las deficiencias
Ambulancia
No ha pasado el control de la Consejería de Sanidad
La única ambulancia medicalizada que tiene el 061 no ha pasado la inspección realizada por la Consejería de Sanidad y al menos ha estado funcionando dos días sin ser sustituida.
Un único vehículo
La otra ambulancia lleva varios meses estropeada
Ahora mismo utilizan en el 061 una ambulancia idéntica a la que siempre han llevado, pero ésta se encuentra en la Península siendo reparada desde hace varios meses.
Jugarse la vida
Miedo a las deficiencias técnicas de la ambulancia
Los propios trabajadores de la empresa SSG que también están en el 061 no se encuentran seguros cuando conducen las ambulancias porque hay problemas mecánicos y ruedas muy gastadas.
Falta de control
El Ingesa no presiona a la empresa concesionaria
El Ingesa como pagador no presiona a la empresa adjudicataria, de acuerdo con las posibilidades que le ofrece el contrato que les une.