Luchadora, viajera y de raíces caballas. Lena Moreno Reyes es una de las grandes promesas del deporte español, como un día lo fuera su madre Sonia Reyes, cuarta clasificada en taekwondo en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004. Si de su madre ha cogido el amor por este arte marcial, en el que acaba de proclamarse campeona de Europa junior, de su padre ha tomado el aprecio por Ceuta: "Es un espacio donde puedo ser yo".
Nacida en Guadalajara hace diecisiete años, de progenitor ceutí, Moreno apenas había aprendido a caminar de manera fluida cuando, con tan solo dos años, comenzó a practicar su deporte.
"Mi madre tenía un club y es algo que siempre ha estado presente en mi casa", relata la jovencísima peleadora.
El camino para Lena Moreno no fue recto, ni mucho menos. Cuenta que "hace cuatro años" decidió dejar la competición. Sin embargo, pasados dos, sintió que le quedaba mucho por dar: "Tenía la espinita clavada y opté por regresar".
Lo hizo por todo lo alto, logrando grandísimos resultados, como el bronce obtenido en el pasado Europeo Sub-23 o su último triunfo, el Campeonato de Europa Junior.
"Es un sueño, fue una experiencia increíble", explica la taekwondista, que se desplazó con la expedición española a Tallin, Estonia, con altas expectativas: "Me tocó competir al tercer día, así que los dos primeros estuve viendo el ambiente en las peleas de mis compañeros. Algo espectacular".
Para frenar los nervios antes del día señalado, Moreno charlaba con su entrenador, que la animaba a "disfrutar", creyendo que podía "ir pasando combates".
Los pasó todos y volvió a su casa de Guadalajara con un oro como premio al gran trabajo realizado. Ahora, le tocará seguir entrenando, pensando en las próximas competiciones, compaginando el deporte con otras de sus aficiones: "Me gusta salir con mis amigos y también viajar, esto último encaja fenomenal con el taekwondo", subraya.
Al menos una vez al año sus viajes la traen de vuelta a la tierra de su padre, Ceuta. Un lugar donde dice sentirse especialmente a gusto y poder ser ella misma.
Solo el tiempo determinará si la jovencísima luchadora de raíces caballas puede colgarse una medalla en los Juegos Olímpicos: "Mi gran sueño en la vida es participar en unos. Nunca se sabe lo que puede pasar, pero creo que podría cumplirlo en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles, en 2028", concluye.