“Te quiero mamá”. Este fue el último mensaje que Ahmed Yellouli envió a las 21:30 horas del jueves al teléfono móvil de su madre Hadiya justo antes de emprender rumbo a Ceuta enfundado en un traje de neopreno.
El viernes, en torno a las cuatro de la tarde, se recibía el aviso de la aparición de un cadáver a unos 300 metros de la playa de Fuente Caballo. El fuerte viento de Poniente lo arrastró hacia esta zona en donde fue descubierto por los ocupantes de una embarcación.
A la vivienda de los Yellouli, en Casablanca, la noticia no tardó en llegar. Ahmed no respondía al teléfono y el joven hallado sin vida tras permanecer pocas horas en el mar vestía la misma ropa que él además de tener una cicatriz en una de las piernas como marca de la intervención que se le practicó tras sufrir un grave accidente de moto.
Ahora Hadiya solo aspira a poder enterrar a su hijo en la tierra que lo vio nacer y de la que quiso marchar junto a otros jóvenes que aspiran a otro futuro. Este lunes se le podrá practicar la autopsia y la Guardia Civil a través de la Unidad Orgánica de Policía Judicial y el Laboratorio de Criminalística trabajará en dotar de oficialidad esos datos personales para que se autorice el traslado al vecino país.
Con 24 años recién cumplidos el pasado junio, natural de El Yadida, Ahmed era un joven formado y preparado que emprendió rumbo hacia Castillejos con el propósito de bordear el espigón del Tarajal.
A esa línea se le conoce ya como el espigón de la muerte debido a la cantidad de jóvenes que han perdido la vida en una ruta que parece sencilla. Como Ahmed otros jóvenes han fallecido en esa travesía y son cuantiosos los desaparecidos de los que nunca más se tiene noticias al no ser localizados sus cuerpos.
Ahmed deja una familia rota y seres queridos que chocan ahora con otro muro: el de la frontera y sus restricciones. De la voluntad política depende la autorización para cruces excepcionales a Ceuta para quienes no tienen visado.
En el 90% de los casos se responde con una negativa a facilitar esas entradas. Solo en contadas excepciones se ha permitido pases de 24 horas para, por ejemplo, asistir a entierros de hijos muertos en esta ruta que descansan por siempre en Sidi Embarek.
Lo común es que la norma se aplique sin miramientos haciendo aún más complicada la realización de trámites como la presentación de una denuncia por desaparición en España o la toma de muestras de ADN a familiares directos de fallecidos a este lado del paso.
En esta fatídica ruta Ahmed únicamente llevaba algo de dinero y dos teléfonos móviles con fotos personales.
Las trabas de la frontera sur
La falta de instalaciones en Ceuta para conservar los cuerpos de fallecidos un tiempo prudencial complica la identificación de quienes mueren en su intento por llegar a este lado de la frontera. Ni existe un depósito con garantías para mantener esos cuerpos ni tampoco una entidad que pueda agilizar los trámites para atender las llamadas de familiares desesperados por saber si los cadáveres hallados en Ceuta son los de sus hijos. Hay desaparecidos de los que nunca más se sabe, de ahí la desesperación cada vez que se notifica el hallazgo de un cuerpo sin vida. Se topan con la barrera de no disponer de datos con la celeridad suficiente como para calmar ese dolor.
Particulares hacen una labor encomiable por conseguir identificaciones oficiosas pero en otras ocasiones se tienen que llevar a cabo los entierros sin que haya dado tiempo a saber la identidad. No todos los jóvenes marchan de su país por motivos económicos sino que en otras ocasiones solo lo hacen movidos por lograr otra opción de vida.
Un país del que salen huyendo sus niños y jóvenes es un país fallido.
Me uno al dolor de cada uno de vosotros y en especial al de su familia. Tengo amistades,familiares,conocidos en ese país y siempre escucho "harraga". Por favor no. Tenéis que crecer como pueblo,exigir vuestros derechos. Sé que es muy difícil pero es la mejor solución. Pesca,agricultura,turismo, venta de vehículos, construcción, etc. Hay dinero pero muy mal repartido. Por desgracia no será el último. Queridos periodistas,menos feria e informarnos un poco de la última semana por las dos bahías. Cerca de los espigones, pocos pasan
Y lo peor es que no será el último. ¿Cuántos jóvenes más se ahogarán?.
Marruecos vende una imagen al exterior de país moderno y democrático y sus ciudadanos se matan por salir de ahí.
¿Cuál es el engaño entonces?.
Muy fácil, ya se habla de la diáspora marroquí, quieren asemejarse a los judíos ya que cada marroquí fuera del país supone divisas para Marruecos y de paso bajan las tasas de desempleo.
La lucha contra la inmigración se limita a los subsaharianos por tres razones:
Evitar que éstos se asienten en Marruecos.
Seguir recibiendo ayudas europeas.
Evitar la rivalidad social en Europa con otras comunidades de inmigrantes.
La inmigración es un gran negocio y da igual las víctimas. Es como la venta de tabaco y alcohol.
Otra víctima más, mientras su rey disfrutando de lujos y la juventud y el pueblo en general muriéndose de hambre. Descanse en Paz
LA CULPA LA TENEMOS EUROPA Y ESPAÑA EN CONCRETO HANTE POR LO MENOS PODIAN VIVIR PERO AHORA NO PUEDEN TENER CONTRABANDO PARECE QUE LA PALABRA CONTRABADO ES MATAR A UNA PERSONA PERO LOS ESPAÑOLES CON ELCONTRABANDO EN CEUTA Y EN GIBRANTAN A SABIDO VIVIR DURANTE MUCHOS AÑOS QUE PENA DE CHAVAL
Uno más al que nadie importa, salvo a su pobre madre.
Europa dona a los politicos, como los de Tunez miles de millones de euros para controlar la emigracion y precisamente desde alli salieron y salen miles de emigrantes, las fuerzas de seguridad son lis que vijilan las cosas y no los politicos.
Todo mi pésame a la familia por esta fatídica y triste noticia pido a Dios que os de fuerza y paciencia y que Dios tenga a este joven chico en el paraíso