La Plaza de Correos ha acogido la tarde de este jueves la tradicional Zambombá Rociera, organizada por la Hermandad del Rocío de Ceuta. Una cita que cada año reúne a decenas de ceutíes para disfrutar de una jornada en la que se respira un ambiente muy flamenco y navideño.
Como ocurre en cada edición, el coro de la Hermandad ha estado sentado en sus sillas alrededor de una candela que los ha arropado del frío. Antes de arrancarse con los primeros villancicos, han empezado a calentar haciendo sonar sus palmas y sus instrumentos a la vez que el olor a humo impregnaba toda la plaza.
No se han hecho esperar mucho, tan solo unos minutos más tarde de la 8:00 han comenzado a entonar unos villancicos tradicionales con aires flamencos que han hecho que todos los presentes, niños, adultos y mayores, se arrancaran también con las palmas e incluso a cantar los estribillos.
Las voces del coro han estado acompañadas del ritmo de la zambombá, los cajones, guitarras, panderetas, palos y triángulos, entre otros. Toda esta mezcla ha permitido que los presentes se impregnaran de un ambiente flamenco a la vez que navideño y se emocionaran con cada tema.
No han faltado los dulces típicos
Durante la cita, tampoco han faltado los dulces típicos de estas fechas, como mantecados, turrones, mazapanes y polvorones. Todos puestos en una mesa para que los asistentes que quisieran pudieran coger y probarlos. También ha habido anís, una seña de identidad de esta fiesta para calentar el cuerpo.
Todos estos ingredientes han hecho que esta zambombá fuera un éxito un año más. Es una fiesta que pretende mantener viva la tradición de cantar villancicos en la calle entre amigos y familiares, como se hacía antiguamente.
Así, tanto pequeños como mayores han disfrutado de este bonito espectáculo, que se tenía que haber celebrado el miércoles, y sentir el espíritu de la Navidad en la calle.