Ya se ha producido el cambio en la iglesia de Santa Teresa de Ceuta. De esta forma, tras la marcha del sacerdote guatelmateco Arturo Pérez Salablanca a la iglesia de Santiago Apóstol del municipio gaditano de la Línea de la Concepción (en el vecino Campo de Gibraltar), el nuevo párroco de la barriada del Morro es Guillermo Ibarra González. Además, también ha recogido el nombramiento de administrador parroquial de la de San José, en Hadú.
Guillermo Ibarra González ha estado adscrito a la parroquia de San Pedro y San Pablo del municipio de San Fernando (Cádiz), más conocida como Iglesia Mayor. Fue ordenado diácono en 2020 como previo paso al sacerdocio y fue en julio, también de 2020, cuando el obispo Rafael Zornoza le hizo entrega de las llaves de la iglesia de San Juan de Dios.
Ahora coge el testigo del padre Arturo, un religioso nacido en Guatemala que ha estado durante más de una década en esta iglesia del Morro y que se ha marchado a la Línea de la Concepción convertido en un caballa más y con muchas amistades en la ciudad autónoma.
Acto del Obispado de Cádiz y Ceuta
El Obispado de Cádiz y Ceuta ha informado de la toma de posesión de cuatro curas en sus nuevos destinos con una imagen en la que han participado los religiosos que cambian de iglesia. En el acto de los nombramientos de administradores parroquiales han estado presentes el reverendo Óscar León Franco Avendaño (de la parroquia de San Juan de Dios de Ceuta) y el reverendo Antonio Pablo Jiménez Gil (de la parroquia de San Paulino de Barbate).
Este traspaso de poderes lo ha presidido el obispo diocesano, Rafael Zornoza Boy, junto al vicario general, Óscar González Esparragosa; el vicario de Ceuta, Francisco Jesús Fernández Alcedo; y el canciller, Cristóbal Flor Domínguez. Durante el acto, el obispo recordó “la importancia de la orientación de la sinodalidad en las parroquias y el impulso de la pastoral de los párrocos, teniendo muy presente la vida litúrgica y sacramental, la catequesis, y la caridad”.
Monseñor Zornoza avanzó además un poco el planteamiento del nuevo Plan Pastoral para este curso e incidió en la relación fraternal entre los sacerdotes aprovechando los encuentros arciprestales y de sacerdotes, así como la asistencia a la formación permanente.
Antes del acto de juramento, la ecónoma diocesana, Carmen Lobato, ofreció los párrocos una serie de indicaciones referente a la administración de los templos.