El artista ceutí Francisco León ha agradecido este viernes en el Parque Marítimo del Mediterráneo la concesión de la Medalla de la Autonomía que ha recibido de manos del presidente de Ceuta, Juan Vivas, emocionado ante sus “paisanos”. “Lo mío no es hablar, sino pintar”, se ha excusado. “Quiero agradecer a todos los grupos de la Asamblea la concesión de este importante galardón y es un orgullo para mí recibir esta gran distinción, la Medalla de mi ciudad, la que me vio nacer y que no he dejado de plasmar en mis lienzos toda mi vida”, ha señalado.
Los paisajes “marineros” de la ciudad desde el Hacho hasta Benzú, el “peculiar” cielo gris de Ceuta, “mis calles y mis gentes”, su “querida” playa de La Ribera han sido una constante en toda su obra, según ha rememorado León.
El pintor ha recordado a su madre (“que con mucho esfuerzo trabajó toda su vida para inculcar a sus hijos que las cosas se consiguen con esfuerzo, trabajo y humildad”), a su esposa (“mi querida Isabel, anda que no la quiero ná ni ná, la que me ha limpiado los pinceles siempre”), a sus hermanos ya fallecidos Gabriel e Ignacio (“que por su mérito y dedicación merecían otra Medalla como esta”) y a sus cinco hijos (”mis críticos más duros”).
“Quién me iba a decir a mí y a mis hermanos cuando jugábamos en La Ribera con los barquitos que me iban a conceder esta distinción”, ha terminado entre un entregado aplauso de todos los presentes.
El presidente de la Ciudad ha destacado que a Francisco León “el arte le corre por las venas” y “le viene de cuna” a través de “su universo, Ceuta, sus plazas, sus calles, sus barrios, sus esencias y su gente, sobre todo, su gente; su motivación, el espíritu que lo anima, es el amor que siente por nuestra tierra”, ha elogiado al condecorado.