Tres de cada cuatro familias atendidas por Cruz Roja no pueden mantener su vivienda a una temperatura adecuada. Y el 88 por ciento de las personas a las que ofrece apoyo la entidad reconoce no entender la factura de la luz. Esas son dos de las principales conclusiones del informe sobre pobreza energética que acaba de publicar la institución humanitaria, que pone de manifiesto la creciente vulnerabilidad en este ámbito de la población atendida por Cruz Roja. En Ceuta, Cruz Roja ha atendido a un total de 19 familias ofreciéndoles un 'kit de ahorro energético' compuesto por 10 bombillas de bajo consumo, un burlete de puerta y dos para ventanas, dos tamizadores de grifo, una manta y dos alargaderas con interruptor, además de reuniones y talleres de ahorro doméstico.
"El año pasado llegamos a 105 familias y este año tenemos previsto llegar a 95. Lo de que vayamos a menos no es malo, sino que es bueno porque el programa de pobreza energética se hace para compensar la huella del carbono que emite la empresa con la que tienes contratado el suministro eléctrico. Por eso nosotros como hemos ido reduciendo la huella y tenemos que atender a menos familias. Esa compensación se hace normalmente ayudando a esas familias sin recursos que va muy en consonancia con nuestra labor", según ha explicado Isabel Brasero, portavoz y responsable de comunicación de Cruz Roja Ceuta.
Además, el 75 por ciento de las familias vulnerables atendidas por Cruz Roja afirman no poder mantener la temperatura adecuada en su vivienda, especialmente en invierno, según datos de la ONG correspondientes a 2021 y recogidos en un informe sobre pobreza energética que se ha presentado este miércoles. Este estudio constata también la necesidad de formación y capacitación en materia energética, tanto para el ahorro y eficiencia en su consumo, como para comprender la propia factura de la luz.
El estudio se basa en datos previos a la invasión de Ucrania, pero sí recoge el efecto de parte de la crisis de precios de la energía que comenzó hace ahora un año. El documento, elaborado por Cruz Roja junto a la organización sin ánimo de lucro Ecodes, señala que un 23 por ciento de estas familias aseguran no disponer de calefacción, frente al 10 por ciento que recogen las estadísticas oficiales del Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE).
La zona climática con más familias que afirman no poder mantener su vivienda a temperatura adecuada en invierno o verano es la Atlántica, que comprende las comunidades autónomas de Galicia, Asturias, Cantabria y Euskadi. Allí el porcentaje es del 82 por ciento. En el área Continental (interior del país) alcanza el 76 por ciento; y en la Mediterránea (Catalunya, Comunitat Valenciana, Murcia y Andalucía, donde también se incluiría Ceuta), el 72 por ciento.
En cuanto al consumo eléctrico medio de las familias, "a lo largo del 2021 se ha situado en torno al 11 por ciento por debajo de la media nacional", con unos 259 kWh (3.108 kWh/año). "Esto se produce a pesar de contar con viviendas y equipamientos menos eficientes, por lo que puede deducirse que las familias atendidas no alcanzan el grado de confort necesario y no disponen del mismo número de electrodomésticos que la media nacional", ha explicado la entidad en nota de prensa.
La mayoría de las personas no entiende su factura de la luz
Cruz Roja incide en la "necesidad de formación y capacitación en materia energética", tanto para el ahorro y eficiencia en su consumo, como para comprender la propia factura de la luz, ya que el 88 por ciento de sus usuarios aseguran no entenderla.
El ahorro potencial medio por familia atendida por la ONG que ha detectado la entidad es de 178 euros al año, correspondiente a un 24% de su factura. “Esta cifra, especialmente, se debe al alto número de familias con derecho al bono social que no lo están percibiendo”. Un 63% de los atendidos por Cruz Roja no están beneficiándose de estos descuentos pero tienen derecho a él, según el estudio. “La automatización en la concesión del bono social por criterios de renta, reivindicación de muchas entidades sociales, acabaría en parte con esta situación”.
Tecnologías obsoletas
El estudio también revela que el 40 por ciento de los hogares a los que atiende tienen un frigorífico en mal estado, y un 78 por ciento de las viviendas no cuentan con iluminación LED. "Ambos factores, por ser tecnologías obsoletas y en mal estado, repercuten directamente en el consumo de las familias. A estas vulnerabilidades también se les suman las humedades en las viviendas, infiltraciones de aire en puertas y ventanas o la falta de agua caliente", ha continuado Cruz Roja en un comunicado.
"A nivel nacional, los últimos indicadores publicados correspondientes al año 2020 revelan que el 10,9 por ciento de la población no es capaz de mantener la temperatura adecuada en su hogar en invierno. Lógicamente, al tratarse de familias vulnerables, en la muestra de hogares atendidos por Cruz Roja este porcentaje es muy superior", indica la ONG.
Cruz Roja recuerda que, según los últimos datos oficiales del Ministerio para la Transición Ecológica, entre un 9,6 por ciento y un 16 por ciento de los hogares españoles se encontraban en situación de pobreza energética en el año del estallido de la pandemia. Esto supuso un aumento del 22 por ciento con respecto al ejercicio anterior.
Pero la escalada de precios energéticos del último año "y su crecimiento desde la escalada del conflicto en Ucrania hacen prever a Cruz Roja un posible incremento" de una problemática para la que la organización ofrece a las familias afectadas asesoramiento, talleres, entrega de kits de eficiencia energética y rehabilitaciones energéticas en viviendas, entre otras.
Como en mayo 2023 entre el partido que esperamos los que trabajamos y pagamos nuestros impuestos se les acaba el chollo de votos y el grifo al PSOE porque el PP en Ceuta ni está ni se encuentra, lo conseguiremos con los votos de los currantes y todo el que quiera ayudas y casas y médicos sin dar un palo al agua a su tierra y este chuoeteo invasor al igual que las que vienen a parir se les va a acabar el cuento chino de ayudas por votos.
Suena a quedada y cachondeo.
Nos tratan como si fuéramos tontos.
En Ceuta nuestras autoridades sólo se dedican a premiar a unos, hacer reconocimientos a otros, a inaugurar Decatlón, cuando llegó a Ceuta y a saludar a todo el mundo ( nuestro presidente) y nombrar muchos consejeros cobrando un pastizal, pero eso de crear empleo para el ciudadano de a pié, nada de nada. Nos dan migajas y todos calladitos.