La enorme familia del Colegio San Agustín de Ceuta está de luto por el fallecimiento de una de las personas que, como tantas otras en el día a día, han labrado la historia de esta centenaria institución. Se trata del padre Miguel Ángel Prada, quien pasara por el centro de la calle Méndez Núñez hace ya varias décadas dejando huella como tantos otros docentes agustinos.
El padre Prada, que residió en Ceuta entre algunos años de la década de los 80 y principios de los 90, ha fallecido a los 72 años dejando a buen seguro un recuerdo entre generaciones antiguas del Colegio San Agustín.
A nivel profesional, este cura ejerció como profesor de Música siendo el maestro que enseñó a leer una partitura con la flauta a esos alumnos de finales de los 80 y principios de los 90. En su faceta musical también le correspondió la tarea de dirigir el Coro de San Francisco, otro de los emblemas de la familia agustiniana de la ciudad autónoma.
No se queda ahí su aportación a esta escuela ceutí, sino que además de la música el padre Prada también fue un maestro en la práctica del baloncesto como se le recuerda en imágenes de la época con el equipo juvenil de la temporada 92-93. Bien es sabido que el deporte, y más concretamente prácticas como el baloncesto o el balonmano, es uno de los pilares de esta Orden de San Agustín.
Desde el colegio apuntan que tras marcharse de Ceuta hace alrededor de treinta años, el padre Prada hizo algunas visitas puntuales a la ciudad caballa y también estuvo cuando el colegio cumplió la fecha especial de 100 años en el 2015.
Asimismo, y aunque el padre Miguel Ángel Prada ya se movió en su carrera docente por otras provincias a las que fue trasladado por la orden en momentos especiales y congresos, se reunió con hermanos agustinianos de Ceuta en expediciones a Madrid, como se puede ver en fotos difundidas por el propio colegio.
En el grupo de Facebook de Antiguos Alumnos del Colegio San Agustín también se encuentran referencias de alumnos de primeros de los noventa que mencionan a quienes fueron sus profesores entonces y, como el padre Prada, cumplieron en otras facetas como responsable del coro o el preparador de los jugadores de baloncesto.
Que descanse en paz. Con ocho años empecé con él en el baloncesto y todavía sigo con 52. Muchas gracias por enseñarme a amar al mejor deporte del mundo.
Gracias Padre Prada
Tuve la fortuna de coincidir con el Padre Prada varios años en el Colegio y además compartíamos afición por el baloncesto. Mi más sentido pésame a los familiares y amigos.
DEP
Aún recuerdo ese curso académico 93/94, cuando el Padre Prada dedicó una de sus clases de Música en 4º de la entonces EGB a hacernos una prueba de voz porque quería fundar un "coro de niños" que cantara en las comuniones. Ahí empezó todo.
Durante varios años, ese coro acabó llenando de música cada domingo en San Francisco y los Remedios, y nos dejó a muchos unos recuerdos inolvidables de nuestra niñez, así como valores imprescindibles.
Gracias, Padre Prada.
Que Dios lo tenga en su Gloria. Mi más sentido pésame a sus familiares, amigos y allegados. QEPD
Todavía recuerdo con cariño mis primeras clases de guitarra. DEP Padre Prada
D.E.P