Todos los indicadores económicos nos muestran que estamos en el camino equivocado, que nuestro crecimiento es ínfimo, nuestro gasto público mayúsculo, nuestro déficit público insostenible y la deuda pública indomable. ¿Por qué seguimos remando como en la época romana cuando ya está inventado el motor de explosión y además en sentido equivocado? La gran esperanza de la Oposición el tal Feijoo, ya ha conseguido un plan económico que ha enviado al jefe del gobierno, es la tercera andanada del gallego, que como las anteriores me temo que tampoco servirá para nada. La primera ocurrió con motivo de la reunión de presidentes de las comunidades autónomas en la isla de la Palma el pasado 13 de Marzo. En esa reunión, Feijoo entonces presidente de la comunidad gallega, dijo que era necesario reducir los impuestos dada la pésima situación en la que nos encontrábamos tras la pandemia y la guerra “putinesca” ya aventada. El habitante de la Moncloa como presidente del gobierno enseguida manifestó que por supuesto los impuestos serían reducidos nada más bajar del Falcon en su regreso a Moncloa, y como la mentira y el engaño es su norte, los impuestos no se bajaron y como sabe que eso duele en el bolsillo de todos los contribuyentes sacó a su coro de cantarines a vocear por doquier la santa letanía: No se pueden bajar los impuestos porque nos cargamos el estado de bienestar que tan merecidamente disfrutamos, ya que la sanidad y la educación serían de mala calidad y las pensiones y sueldos públicos no podrían soportar esa rebaja. Así es que de lo dicho en Palma, ya saben, “palmero sube a la palma…”
Feijoo mantuvo su postulado de bajar los impuestos y la segunda vez que vio al Maniquí ya fue cuando ascendido a jefe del partido con mayor número de votos y presidente del PP, fue llamado a loa Moncloa a la que acudió educadamente, eso sí llevando bajo el brazo de nuevo la rebaja fiscal que pretendía enseñar al monclovita. Vano deseo, el presidente del gobierno lo felicitó efusivamente porque con el tal Casado no se podía negociar y con este Feijoo, seguro que sí, era otra cosa, así es que ¿cuándo cambiamos a los miembros del CGPJ, Alberto?. El amigo Alberto no acertó a balbucear otra cosa que ya veremos, pero de enseñar los documentos que llevaba o al menos, comentar los datos de la rebaja fiscal con el amigo Antonio, nada de nada. Dejó su carpeta y hace poco don Antonio manifestó que todavía no había leído ninguno de los documentos entregados. Era su segunda intentona.
A la tercera tampoco va la vencida. Envuelto en un plan económico de estado y avalado por algunas cabezas pensantes del PP y de fuera de él, Feijoo presentó lo que ha denominado “Plan de medidas urgentes y extraordinarias en defensa de las familias y la economía de España” y el gallego advirtió al Maniquí, para que no creyera que esos documentos habían surgido de las solas cabezas del PP : “Quiero aclararte que el documento que te adjunto no ha sido elaborado en exclusiva por el Partido Popular, ya que en su concepción y desarrollo han participado decenas de personas de la sociedad civil que siendo conocedoras de esta iniciativa han formulado sus aportaciones”. Dice además que este plan país no pone condiciones al ejecutivo, solo busca un acercamiento sin dogmatismos, por ello lo presentó sin las siglas del PP para intentar acercarse, como él, a los socialdemócratas del PSOE.
"Por supuesto que el descontrol de los precios y el elevado precio de la energía ha pasado su factura, pero a nosotros por unas circunstancias o por otras siempre, alguien o por algo, nos está pasando factura"
Ese documento, bien documentado, iba en la buena dirección de reducción de impuestos y reducción del gasto público, pero muy romo y con poca ambición para la magnitud de la hecatombe de deuda que mantiene el Gobierno, y tampoco ha sido digno de la atención del presidente del gobierno. Feijoo propuso una bajada de impuestos 10.000 me y 5.000me del Plan de Recuperación para bonificar fiscalmente la energía a las rentas bajas. El PP sigue sin darse cuenta de la situación en la que nos encontramos y solo produce pequeños ajustes que no sirven prácticamente para nada, solo de nuevo el corto plazo. En los tres primeros meses de este año hemos perdido 100.200 ocupados y se registró una pérdida de 55.700 autónomos menos que a finales de 2021 , a pesar del incremento exagerado e ineficaz aumento de funcionarios que, desde la llegada del Maniquí en Junio de 2018 , ha experimentado la Administración Pública en todos sus niveles especialmente en el autonómico que mantienen el mayor número de funcionarios con un incremento del 20% hasta elevar la plantilla en el pasado mes de Marzo hasta los 1.722.884 empleados en las CC.AA. El número total de funcionarios asciende a 2.828.941 entre los cuales además de los citados de las autonomías, la Administración Local mantiene 725.291 y la General del Estado 380.766. La estructura del Estado tiene un coste inasumible suponiendo junto a pensiones una carga de 300.000 millones anuales.
Por supuesto que el descontrol de los precios y el elevado precio de la energía ha pasado su factura, pero a nosotros por unas circunstancias o por otras siempre, alguien o por algo, nos está pasando factura. Al finalizar Marzo el número total de parados alcanzó los 3.174.200 y el de ocupados en 20.084.700 personas, situándose la tasa de paro en el 13,6%, la más elevada de la UE y duplicando la media europea. España se caracteriza por tener el mayor desempleo juvenil de Europa 30,2% de toda la fuerza laboral en el primer trimestre del año. Si echamos la mirada hacia atrás, la renta per cápita en 2005 era de 23.000 euros, la misma que en 2021, 16 años sin crecer, pasando de ser el 2% de la economía mundial, al 1,37%. Mientras otros países, cercanos o no, sí han crecido en ese mismo periodo, como Irlanda un 79 %, Alemania el 18,7% y los EEUU17%. En 2005 trabajaban en España 19,2 millones de españoles, en 2021 solamente 19,6 millones, hemos creado solo 400.000 puestos de trabajo; el déficit estructural de las AAPP era del 3,43%, ahora 5,3%, la deuda pública entonces el 42% del PIB ahora del 120%. Nuestro retraso es producto de las decisiones equivocadas de la política económica, todo se hace para ganar votos en el corto plazo a base de gastar y gastar. La deuda ha alcanzado el máximo histórico de 1.442 billones de euros, lo que supone un 5,5 % más que hace un año (74.474 millones más) según el Banco de España. Siempre se habla de desigualdad, subvenciones, ayudas, todo sobre el gasto y nada sobre el crecimiento. La estimación de crecimiento de este segundo trimestre del año es cero. Con este gobierno es imposible acometer las reformas necesarias, solo desea gastar ineficazmente y, espero que pronto Bruselas cortará fondos, y aun cuando el gobierno diga que los necesita, al comprarlos más caros, ineludiblemente habrá que parar de gastar y reducir sin más remedio el gasto público.
Como pasa con Francia, España está cayendo por la pendiente del aumento del gasto público incesantemente. No somos capaces de renunciar a nuestras prebendas una vez obtenidas y los dirigentes son incapaces de redirigir la economía del país en relación con los ingresos recaudados. Así no importa que nademos en subvenciones completamente innecesarias, salvo claro está para quien las recibe, o la renta mínima disponible, o los salarios mínimos, o el aumento de Ministerios con el personal que lleva consigo para realizar políticas que no sirven para nada, o indexar las pensiones y los salarios públicos a la inflación anual, por no hablar de las duplicidades de organismos en las autonomías y el aumento de funcionarios en las mismas. Así es imposible crecer. Aprovechamos cualquier resquicio de “Bruselas” para pedir más en vez de intentar dominar el déficit presupuestario anual y de ajustarnos a las reglas fiscales de la UE. Nuestra misión es gastar, gastar y gastar, y da lo mismo que sean Ayuntamientos, Autonomías o el Gobierno de la Nación. Por ello el reducir los impuestos, que en otro año era propio de socialistas,(según Zapatero) “ni está ni se le espera” y ocurre con este Gobierno que es el peor que encontrarse pueda, pero la tendencia no ha parado desde 2005.
Hay que cambiar necesariamente la estructura económica del país y la estructura político-administrativa que ha generado una serie de incentivos para que no se tomen las decisiones adecuadas, resultando en una calidad democrática deteriorada y una eficiencia económica cada vez más baja. La reforma de la Administración para, apoyándose en los avances tecnológicos, lograr su reducción en el número de empleados en vez de hacerla cada vez mayor, es una meta a lograr por cualquiera de los gobiernos venideros. En la misma línea, acabar con la colonización de las instituciones que desequilibran la objetividad de la democracia por parte de los partidos políticos es esencial .A no ser que despreciemos la democracia parlamentaria como eje de nuestro sistema. Es necesaria una reforma total del modelo económico. Si seguimos así seremos la terraza favorita donde vendrán a solazarse los carniceros, pescaderos, conductores, etc. del resto de Europa, modelo actual. No podemos seguir con este modelo de servicios cuando tenemos suficiente inteligencia para ser un país puntero y desgraciadamente nos encontramos en esta situación por la errónea dirección política en materia económica desde hace al menos 16 años. La propuesta de bajar impuestos y gasto público es muy buena en sí pero insuficiente, no se puede curar con cataplasmas. 60.000 millones no 10.000 son los que diferentes estudios lastran nuestro presupuesto (IEE).Es necesaria una reforma radical del Estado. Feijoo parece una nueva edición de Rajoy porque no acaba de enterarse de la gravedad del sistema y teniendo en ciernes el giro de la política financiera de la UE por la que para apagar los efectos inflacionista hay que dejar de comprar toda la deuda soberana que hasta ahora se compraba incluso dando a la máquina de producir billetes y elevar el tipo de interés, lo que producirá un aumento de déficit por los elevados gastos financieros que será necesario pagar si queremos que nos compren la deuda, de nuevo más deuda y esta vez con altos intereses , lo que es una catastrófica noticia para nuestra deuda. Hay que enfrentarse de una vez a las reformas. La reactivación de la Industria, la construcción de centrales nucleares que abaraten la energía, el desarrollo de un plan hidrológico nacional que lleve agua a todos los campos posibles, el acompasamiento a todas las innovaciones tecnológicas junto al apoyo a la construcción civil y militar de aeronaves y buques y a la construcción de automóviles, y una reforma laboral mucho más flexible que permita mucha más libertad y menor costo para el empresario a la hora de despedir y de emplear , que ya ha dado muy buenos resultados en sociedades más libres, todo ello requiere necesariamente un gran pacto de Estado entre organizaciones empresariales , sindicatos, partidos políticos, asociaciones de múltiples características, y fundaciones que deben comprender que solamente deben subsistir con las cuotas de sus asociados no de la caridad política. Pacto que siendo posible, por ahora es irrealizable.
El Presidente del gobierno ha salvado la convalidación del R.D para amortiguar la crisis económica derivada de la invasión de Ucrania, con la ayuda de los etarras de Bildu y la prostitución del Congreso de los Diputados iniciada por su Presidente, la tal Batet, como ha manifestado una de las diputadas. El actual no es el gobierno apropiado para las reformas que aquí se han defendido al ser el peor de todos los países europeos, nunca se esperaba que le infligiera tanto daño a la nación. Pero si nuestra España ha sobrevivido a tantos y tantos desastrosos gobernantes ya sean vestidos de rey o de presidente de la república, ¿cómo no va a sobrevivir a un pobre indigente mental? Solo es necesario tener a nuestro lado a una buena amiga, la paciencia.