Y de nuevo, ha vuelto a ocurrir. Vecinos de Ceuta, en este caso de Real 99, es decir, en una de las zonas más céntricas de la ciudad, se han desvelado esta madrugada con el fuego amenazando bajo sus ventanas después de que desconocidos hayan provocado el incendio de un contenedor. Un suceso que, por fortuna, no ha pasado a mayores, sin afectar a los vehículos que se encontraban aparcados en las proximidades, por ejemplo, ante la rápida llegada de los efectivos del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) quienes han actuado para apagar las llamas a la mayor brevedad. Según la información recabada entre vecinos y por los propios bomberos, la alarma ha saltado sobre las 1.15 horas de la madrugada y la salida de los efectivos se ha prolongado durante aproximadamente media hora.
Las imágenes que, grabadas desde sus ventanas, algunos vecinos han subido a las redes sociales dan buena cuenta de la magnitud que han llegado a alcanzar las llamas en un suceso que evidencia que ni siquiera el centro de la ciudad escapa al actuar de quienes nada respetan. Algo que recuerda que el problema continúa sin que nadie logre erradicarlo de raíz y sin que, en la mayoría de los casos, se llegue nunca a identificar a los autores de las quemas.
Cabe mencionar que este mismo fin de semana ha sido otra zona, en este caso la de Bermudo Soriano, la que también ha sido testigo de la quema de contenedores siendo estos elementos del mobiliario urbano, junto con los vehículos abandonados, el principal objetivo de quienes utilizan el fuego por mera diversión.
Unos sucesos que, sino a diario, se registran con mucha frecuencia. Mayor presencia y vigilancia policial es el reclamo de muchos ceutíes, del mismo modo que desde las instancias competentes también se pide la colaboración ciudadana como principal arma para la identificación de los autores.
Es que hay algunos que no se ubican y confunden Valencia y las Fallas con Ceuta y el Príncipe...
La ciudad llena de camaras y nadie ve nada.
Da que pensar porque para poner multitas salen de la
Nada