Tres de las 190 plazas de empleo público para personas con discapacidad intelectual que este se ponen en juego a nivel nacional a través del examen oposición están consideradas para Ceuta. Concretamente, según se detalla desde Plena Inclusión, estas plazas corresponden al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), para donde se asignan dos, y al IMSERSO, donde hay un puesto de empleo para personas con discapacidad a cubrirse. Desde la mencionada asociación se indica que, en nuestra ciudad, se ha impartido formación dirigida a aspirantes ceutíes y también se han realizado simulacros de examen. A nivel nacional hay 2.550 personas aspirantes para esos 190 puestos de trabajo en el Estado.
El examen se desarrollará en la Universidad Complutense de Madrid y gracias a estas oposiciones, el Estado cumple con la cuota legal de reserva del 2% de plazas de empleo público para personas con discapacidad intelectual. En la última década, 447 personas han conseguido trabajar en oficinas de la Administración del Estado una vez aprobadas las oposiciones, de un total de 9.198 aspirantes.
"Durante todo ese tiempo, Plena inclusión España, organización que defiende los derechos de 150.000 personas con discapacidad intelectual y del desarrollo y sus familias, ha venido colaborando con la Secretaría de Estado de Función Pública para facilitar el temario del examen, realizar todas las adaptaciones necesarias e informar a todas las aspirantes del proceso selectivo", se recalca desde la asociación. Esta colaboración se replica, igualmente, en Ceuta gracias al trabajo del personal de Plena Inclusión Ceuta.
Desde Plena Inclusión también se recuerda que las personas con discapacidad intelectual tienen menores tasas de empleo que el resto de la población (ODISMET, 2020). "Afortunadamente, el compromiso de las diferentes administraciones ha permitido que cada vez haya más convocatorias específicas tanto a nivel estatal, como autonómico y local", recalcan. Además de lograr una estabilidad económica a largo plazo para estas personas, el empleo público supone una verdadera palanca para la inclusión.
Maribel Cáceres, vicepresidenta de Plena inclusión España, lo explica también así: “Para las personas con discapacidad intelectual como yo, el empleo público es fundamental porque promueve que podamos tener más control sobre nuestras vidas, más confianza en el futuro, y nos permite ampliar relaciones y poder contribuir a nuestra comunidad”.