Dos vehículos de la empresa de autobuses Hadú Almadraba de Ceuta han sido atacados este miércoles cuando circulaban por la zona de Arcos Quebrados, justo en la subida próxima a la explanada que sirve de punto covid. Esto ha provocado que no se haya podido cumplir con los trayectos previstos hacia la barriada del Príncipe y la de Loma Colmenar porque se han producido desvíos. Tal y como han comunicado desde la empresa a este periódico, no ha habido que lamentar daños materiales en cuanto a rotura de lunas como ha ocurrido en otros sucesos de esta índole ni personales.
Es un nuevo ataque al servicio de transporte público que siempre está en el ojo del huracán de aquellos violentos que se dedican a dañar los bienes comunes. Lo hacen lanzando piedras contra servicios de los que se sirven vecinos de todas las barriadas próximas, a sabiendas de que si se suspenden los trayectos no se puede cumplir con las reclamaciones de los residentes. Además pueden causar daños mayores entre quienes ocupan los autobuses por el impacto de las piedras.
Reunión anunciada para valorar la seguridad
Justo a final de 2021 se produjo otro apedreamiento que sí causó daños a su paso por la barriada de Erquicia, lo que provocó la reacción y condena por parte de sindicatos y el anuncio de que se iba a celebrar un comité de seguridad que valoraría, incluso, la suspensión de trayectos en los considerados ‘puntos calientes’.
La Policía no ha procedido a la detención de los implicados en este ataque. Es difícil porque acostumbran a actuar por sorpresa y luego abandonar a la carrera las zonas desde donde esperan, apostados, el tránsito ya no solo de los autobuses sino también de las fuerzas de seguridad para atacarlas. Ha existido una condena unánime por lo ahora sucedido que viene a sumarse con otros actos similares.
Me acuerdo hace bastantes años ya, que en semana Santa con el Medinaceli, muchos becerros de estos se divertían tirando piedras al paso.
Una persona influyente en aquel entonces, en esa barriada, dijo: no quiero que se tire una sola piedra y nadie tiraba absolutamente nada.
A esa tipo de voces son las que le hacen caso y para eso no hay rebeldía, para eso en ese entonces no había huevos de hacer lo contrario, porque serán menores pero conocen y saben lo que es el barrio y quién mandaba y hacia respetar su pslabra.
Ahora ya ni siquiera hay voces importantes que pidan eso ni respeto por esas voces.
Hace falta otro señor como ese que ponía más orden (cuando le interesaba) en el barrio, que las propias instituciones y leyes.
Reducir los horarios, solo servicios de mañana y se acabo
Sólo horario de instituto.