La pandemia del coronavirus ha causado estragos en la sociedad, sobre todo en el periodo de confinamiento. Hay personas que psicológicamente se han visto muy afectadas, y, sobre todo, aquellos que necesitan más de esa ayuda. Ahora, meses después, los niños y niñas con TEA en Ceuta están volviendo a realizar sus actividades gracias a Acintea, esas que quedaron frenadas por culpa de la pandemia.
El ocio supone un complemento a la labor educativa y asistencial de las personas con Autismo. Realizar actividades lúdicas en grupo permite afianzar el desarrollo de las habilidades sociales, la interacción con otras personas y el medio que le rodea, generalizar los conocimientos a diferentes contextos, promover su autonomía persona y mantener los aprendizajes académicos, y sobre todo disfrute de momentos de alegría y disfrute personal.
De ahí que la Asociación Ceutí para la Inclusión y Formación de Profesionales y Personas con TEA (Acintea) esté llevando a cabo este verano ‘Summertea’, un programa dedicado a los niños y niñas de 4 a 16 años en favor de su inclusión real y para que todos puedan disfrutar de juegos y ratos de diversión junto a otros niños.
Por ello, desde la asociación están desarrollando actividades con estos niños con Trastorno del Espectro Autista para los que resultan de vital importancia estos ratos de ocio jugando juegos de toda la vida, pintando con los dedos, dando alas a su creatividad y diversión o simplemente disfrutando de la Playa de la Ribera, del Parque Marítimo o de entornos naturales de nuestra ciudad junto a sus monitores.
Gracias a esta asociación, el ocio y tiempo libre está al servicio de las personas con Autismo y sus familias, de este modo se consigue además mejorar las condiciones ambientales familiares y sociales tan importantes para el bienestar de los niños con TEA.