Se llama ‘La Esperanza’, pero en vez de estar situada en Ceuta se trata de una asociación con sede en Rubí (Barcelona). “Desde el Monte Hacho hasta aquí”, explica emocionado Amine Zarghil, un joven de Tetuán que en el año 2005 era uno de esos niños que la Ciudad acogió en la vivienda de San Antonio que la Fiscalía clausuró para trasladar a los MENA al actual albergue de Hadú. Estuvo cinco años en Ceuta, un tiempo que le marcó su vida hasta gestar un recuerdo agradecido de todo el apoyo que recibió. Esa querencia, ese cariño le han llevado a bautizar esta asociación de nueva creación con el nombre del centro que le ayudó a ser la persona solidaria que es en la actualidad.
“El centro de menores donde estuve tantos años se llamaba ‘La Esperanza’ y me llevé muy buen recuerdo de él por todo lo que me ha pasado en la vida y todo lo que pude aprender allí y lo que me enseñaron los trabajadores”, explica Amine en una entrevista con El Faro de Ceuta. “Allí siempre tuve apoyo y enseñanzas. Para mí ‘La Esperanza’ lo es todo en mi vida, por eso el día en el que decidí crear esta asociación no se me ocurrió otro nombre más que este. Para mí, en todo lo que vamos a hacer en la vida tenemos que tener la esperanza de que va a salir bien, porque sin esperanza no podemos hacer nada. Nuestro lema, el de la asociación, es precisamente que mientras haya vida hay esperanza. Y no he encontrado mayor homenaje que llamar a la asociación con el nombre del que fue mi centro”, añade.
Así, la asociación La Esperanza ofrece actividades culturales, sociales y deportivas basadas en la integración. Amine figura como presidente, y junto a él trabajan como secretaria Dalila Barrouhou El Faouzi y como tesorero, Nour Eddine Kharchouch. El espíritu de aquel centro de San Antonio se traslada a Rubí con la finalidad de promover la inclusión social de las personas en riesgo de exclusión cubriendo sus necesidades básicas. Organizan actividades extraescolares, llevan a cabo otras culturales y también colaboran con inmigrantes para favorecer su inclusión positiva en la sociedad mediante cursos de idiomas o informática.
“Hemos creado esta asociación para que vean aquí que los marroquíes podemos hacer algo, aportar algo a esta sociedad, participar en varias cosas y ayudar a los necesitados. Yo soy presidente de la asociación, ejemplo de que un MENA puede serlo en un futuro, porque los MENA no somos tan malos como nos pintan por ahí. Tenemos objetivos en la vida y metas que conseguir, sueños por los que luchamos para hacerlos realidad. Mi sueño es que esta asociación llegue a lo más alto posible, ayudar a todos los que llegan para que no les falte de nada. Que cada persona que llegue tenga un sitio a donde ir para integrarse y tener oportunidades para cambiar su vida. Si nosotros hemos dejado nuestro país y nuestras familias es para tener una vida mejor que la que hemos tenido. Nuestra asociación tiene de base ayudar”, resalta Amine.
‘La Esperanza’ de Rubí busca además concienciar sobre el respeto intercultural y la tolerancia así como ser un punto de apoyo para los jóvenes inmigrantes en su desarrollo personal y profesional. Sin ánimo de lucro, disponen de una programación rica y ofrecen clases de árabe y cultura destinadas a todas las nacionalidades interesadas. Con motivo de la llegada del mes sagrado de Ramadán han preparado una iniciativa para dar de comer a los necesitados durante ese periodo para lo que han abierto una cuenta bancaria buscando la colaboración de quien quiera ayudar.
Tienen más de 90 personas a los que prestan ayuda, algo que ya hicieron durante la pandemia. Quien quiera colaborar para esta iniciativa de Ramadán puede hacerlo llamando al número de teléfono 632321256 o donando en este número de cuenta IBAN ES4200810014000002183124 BIC BSABESBB.
... Y los otros mas de 9000 menas...?
DE TODO CORAZON QUE VAS A TENER SUERTE Y TE VAS A RODEAR DE LOS MEJORES ESTAMOS CONTIGO
Enhorabuena Amin. Una muestra de que el esfuerzo merece la pena. Y un poco de ayuda y mucha suerte.