Los datos que nos traslada la secretaria de Mujeres e Igualdad de CCOO de Ceuta, Rosario Andreu, publicados en la revista del sindicato a nivel nacional, sobre la situación de las transfronterizas en Ceuta en tiempos de COVID-19, deben analizarse con detenimiento, pero sin lugar a dudas deja en muy mal lugar a los empleadores y, por supuesto, a los organismos que deben de vigilar e inspeccionar para que las trabajadoras y trabajadores no sean explotados.
Según el estudio unas 25.000 mujeres marroquíes entraban en la Ciudad Autónoma de Ceuta para realizar preferentemente tareas de hogar. De ellas el 70% no tenía regularizada su situación laboral, es decir, trabajan con empleadores sin estar dadas de alta en la seguridad social y, además, el 95% del total de estas trabajadoras no percibe el sueldo estipulado sino una especie de pacto donde reciben unos 20 o 25 euros diarios si van a varias casas a la semana.
Tendríamos que ser muy cínicos para llevarnos las manos a la cabeza sobre los datos aportados por los compañeros de CCOO, porque es de dominio público en Ceuta. Igual de cínicos o más si queremos justificar estas explotaciones con argumentos como “peor es que no trabajen, nadie les pone un cuchillo para que lo hagan o saben las condiciones antes de trabajar”, porque esos argumentos no justifican nada y dicen mucho de la catadura moral del que la expresa.
El exdelegado del Gobierno Francisco Antonio González (Q.E.D) autorizó la contratación de trabajadoras transfronterizas para acabar con una situación laboral de explotación injusta que, evidentemente, minimizó muy poco la explotación, porque sólo 2.031 mujeres fueron regularizadas, aunque a pesar de ello, seguían realizando jornadas superiores a las que les abonan en el contrato. Por tanto, ante la situación denunciada por CCOO se pueden hacer dos cosas: oídos sordos o poner los mecanismos que eviten la explotación de trabajadoras y trabajadores que dejan en muy mal lugar a los empleadores, a la propia ciudad y, por supuesto, a los organismos encargados de evitar la explotación laboral de todos los ciudadanos -españoles o extranjeros-.
Francisco Antonio González dio un paso importante, pero como decía, no ha sido suficiente y, por tanto, se deberían implementar medidas que impidan que en este país se dé esta situación, porque la legislación que regula las contrataciones laborales en las Ciudades Autónomas son las mismas que en el resto de las comunidades. Unas medidas que, de alguna manera, fomentarían el empleo local y acabarían con la “mala idea” o la mala imagen que algunos pretenden dar de las trabajadoras de nuestra “pequeña y marinera”, porque a veces da, permítanme la expresión, da “HASTA ASCO” escuchar a trabajadores -como usted y como yo- decir que las ceutíes no quieren trabajar y por eso contratan a marroquíes. Las ceutíes no quieren trabajar con un mísero sueldo, un montón de horas, sin asegurar, mientras usted, yo y otros muchos, cobramos un buen sueldo de funcionario, trabajamos 37,5 horas a la semana, exigimos todos nuestros derechos y, como debe ser, seguimos reivindicando mejoras económicas, laborales y sociales.
Mi padre utilizaba una expresión que resume y mucho los intentos de estas justificaciones: “Todo el mundo no puede vivir en la calle Real” si para hacerlo tienes que traficar con droga, robar o explotar a un trabajador. En definitiva, si no podemos contratar con todos los derechos a una persona, lo mejor es sacrificarnos y hacer las labores de casa o contratarlos menos horas, pero no a costa de explotar a un trabajador, sobre todo, cuando muchos empleadores son también trabajadores.
Creo que no me equivoco si digo que lo que escribo es lo que viene a expresar CCOO en su informe, aunque no tan explícitamente, pero entender otra cosa es imposible o por lo menos es lo que percibo.
Disculpen las molestias.
Tanto CC.OO como el que ha escrito este artículo, lo único que hacen es darle la Razón a Marruecos, que aquí explotamos a los marroquíes, el gobierno marroquí se justifica con estos artículos y se agarra a. Que somos unos explotadores, en la próxima reunión en febrero, todos estos datos servirán de apoyo al gobierno marroquí, de que somos unos tiranos explotadores, tanto El Sr. Amado como los fantasmas de CCOO que sepan que con esto lo invoco que hacen es perjudicar a Ceura
Ahora resulta que se reivindican los derechos de las trabajadoras de Marruecos. Dediquese a trabajar para los españoles/as que para eso recibe su sindicato cuantiosas sumas de dinero del estado español y que Marruecos se encargue de los suyos, con los problemas de trabajo que hay en Ceuta y aquí gastamos el dinero del contribuyente en arreglar los problemas de los marroquies. Qué progres somos !!!!
El artículo es alarmista, desde hace varios años y hasta marzo de este, he tenido contratada con toda su documentación en regla una empleada de hogar y jamás le he aplicado esclavitud salarial. Tratar de esclavas a estas personas no es real, quizás sean esclavas las que quedan en su país y es ahí donde es necesaria la abolición de la esclavitud ya que su sueldo es más bajo del que reciben ellas aquí. Luchemos por los derechos que estamos perdiendo a pasos agigantados en nuestro país y que en su país sean tratadas con la dignidad que se merecen.
Lo lamento por estas personas, pero una cosa que es innegable es que ahora sí se contratan a trabajadores Ceutíes, y eso redunda en beneficio de todos y sobre todo de la ciudad. Creo que debe ser Marruecos quien les oferte trabajos a estás personas y no Ceuta.
Facil solución, no dejar entrar a nadie sin contrato.
FRONTERAS CERRADAS HASTA QUE NO HAYA COVID.
De acuerdo con el artículo.
Yo añadiria que hay mucho sindicado que emplea a mano de obra marroquí para arrojarse cuadro duros.
Además de defraudar a hacienda y explotar al trabajador también colapsa el mercado de trabajo ceutí. ¿ cuanto bajaria el paro en esta ciudad si se emplearan a ceutíes como fontaneros, albañiles, electricistas etc en vez de mano de obra marroquí a dos duros y en negro?
Una forma de controlarlo es impidiendo que entre cualquiera por la frontera cuando se reabre. Es decir, entrando en Shegen.
Pero ya sabemos que poderoso caballero es don dinero.
Es un articulo que se asemeja mucho con el trato de las condiciones ,tanto de trabajo y sobre todo de sueldo con los militares ,sobre todo la tropa que abandonará el ejército a los 45 años, espero que Amado un día de estos le dedique un articulo, porque la desamparado por parte de sindicatos y de los gobiernos de antes y de ahora
Cuando se firma un contrato del tipo que sea, está para cumplirlo. Al firmar se sabe la duración del mismo. Y en verdad que me gustaría que se solucione la situación de los militares.
Si aplicarían la ley, un porcentaje alto no trabajarian, las circunstancias obligan a aceptar estos trabajos, lo saben.
Los trabajadores-as tranfrnterizos son armas de doble filo lo mismo bestan trabajando para su amo español con sus papeles y luego presumen de trabajar en 'la ciudad ocupada de ceuta" lo dicen cuando estan en marruecos.
Ha habido muchos caso
Lastima la minima con estos tranfronterizos. No me gustan
La calle real no tiene interés alguno. Es sumamente ruidosa y con vistas al edificio de enfrente. Hay mejores sitios para vivir aquí, como por ejemplo la calle Independencia o el Recinto. En todo caso el problema se producirá si algún día abren la frontera y habría además que enterarse de lo que ganan estas señoras por trabajar en uno de los Palacios reales de SM .
No son esclavas, son descendientes de familias humildes y fueron esclavizadas.