Justo este miércoles se cumple un año desde que Interior comenzó a ejecutar en la valla que separa Ceuta de Marruecos la retirada de las concertinas. Justo se cumple un año desde que la cartera que dirige el ministro Fernando Grande-Marlaska puso en marcha esa operación de cambio radical que perseguía eliminar las alambradas que han dejado muertos y heridos a cambiar de colocar nuevos elementos como peines invertidos y tubos, además de elevar la valla hasta los 10 metros de altura. Un año después la práctica totalidad de las concertinas se ha retirado, a excepción de las colocadas en la parte exterior, en la zona que da a Marruecos. Labor mucho más lenta que la llevada a cabo por el vecino país que ha sumado a la construcción de nuevas vallas el blindaje de todas ellas con más concertinas y zanjas.
Interior no ha facilitado plazos de cuándo la empresa Tragsa habrá finalizado toda la acción encomendada en los algo más de 8 kilómetros de línea perimetral, una acción con la que eliminar los elementos que el propio gobierno del PSOE colocó en 2005, coincidiendo con la crisis de las vallas. Los trabajos de retirada han sido presupuestados en algo más de 8 millones y se anunció que deberían formar parte del olvido a finales de este 2020. De momento queda trabajo aún por hacer aunque se han retirado de tramos complicados como el de Benzú en donde se llegó a temer desprendimientos como el ocurrido en Finca Berrocal.
El pago hecho a Marruecos para que refuerce su blindaje en las dos puertas de entrada terrestre a Ceuta, la de Benzú y la de Tarajal, ha desviado las rutas hacia Canarias y, directamente, al mar. Desde hace casi dos años no se registran entradas de inmigrantes por el vallado salvo casos esporádicos, aislados y no solo protagonizados por subsaharianos sino, también, por marroquíes. Atrás, en la memoria de quienes no olvidan los años de tragedia, quedan las imágenes de las muertes de inmigrantes que quisieron entrar a la carrera y murieron desangrados o las de aquellos que quedaron marcados para siempre con las cicatrices que nunca más podrán eliminar como marcas de lo que cuesta dejar atrás el África subsahariana por una Europa que ejerce con mano de hierro su papel de gendarme.
Europa y concretamente España, no ejerce con la suficiente mano de hierro su papel de gendarme, cuando siguen invadiendo nuestras fronteras sea como sea y sin importarles las consecuencias, que ya hemos visto mas de una vez.
¿Para qué sirven las fronteras? ¿Para qué sirven los visados y los pasaportes? ¿ Y cómo hay gente que apoya estas invasiones, sin control, sin saber de qué calaña son los que entran y en qué estado de salud se encuentran, teniendo en cuenta la pandemia que estamos padeciendo? Ahora como digo verdades como puños, no espero que esto lo publiquen pero dicho queda.-
Si lo que quieren los sociatas es q entren y entren...
O salen rápido estos del poder...
Ceuta y España 0 futuro
Otro gasto más que no sale de sus bolsillos se suben las dietas y sueldos tanto que se enmascaran partidas presupuestarias para pagarse ellos mismos y dan a la Policía Nacional este año que entra 100.000 € para material anti disturbio lo que cobra cualquier asesor nombrado a dedo al año como poco gran gobierno ahora votar otra vez a un partido asín que pacta con quien antes apoyaba a asesinos y quiere sacar de la cárcel a quienes quieren un trozo de españa sin sentirse español