La madrugada de este sábado, que por las restricciones de movimiento que marca el toque de queda comenzaría siendo silenciosa terminó alertando a algunos vecinos de la barriada de Hadú. El motivo que llegó a despertar a varios residentes de la zona no fue otro que las llamas, que desprendía el incendio en una de las edificaciones del lugar.
El edificio en cuestión pertenece a la calle Ruiz Álvarez, en una zona con viviendas bajas en las que la parte de arriba de una de las azoteas contiguas al domicilio fue lo que, finalmente, comenzó a arder. Afortunadamente, fueron los propios vecinos y vecinas de los alrededores quienes se percataron con rapidez de lo ocurrido, y acudieron al lugar para controlar el incendio con el fin de que no se extendiese hasta llegar a convertirse en un fuego más difícil de parar una vez llegase el equipo de Bomberos.
Cuando se personaron en el lugar los efectivos del SEIS acompañados por la Policía, pudieron acabar con el incendio con relativa facilidad gracias, en parte, a la colaboración de la ciudadanía que había logrado evitar que las llamas se desplegasen sin control. Una vez llegaron las autoridades, eso sí, el problema se dio por resuelto y estos vecinos y vecinas pudieron, finalmente, descansar.
Fue con la ayuda de la rapidez y la perspicacia con la que se percataron de lo ocurrido y acudieron, en consecuencia, a contener el fuego que se logró evitar un acontecimiento que, aunque ahora haya quedado dentro de lo anecdótico y como un susto para quienes residen en esta zona de Hadú, podría haberse convertido en un suceso considerablemente más grave.
Incendios pese al toque de queda
Aun con las limitaciones que prohiben salir a la calle a partir de las 22:00 horas para frenar el avance del coronavirus, en la ciudad no cesan los incendios dentro de esta franja horaria, que comprende desde esta hora de la noche hasta las 7:00 de la madrugada.