Agentes de la Guardia Civil de Ceuta han rastreado este lunes las inmediaciones de los acantilados del Recinto en busca de posibles fardos de hachís, después de que en la noche del domingo el piloto de una moto de agua escapara del lugar tras arrojar al agua su chaleco salvavidas en donde ocultaba entre 12 y 14 kilos de esta droga. Las patrullas del Instituto Armado no pudieron darle alcance, huyendo hacia Marruecos. Lo que sí encontraron fue la droga dentro del chaleco. Al ser de noche suspendieron las labores de búsqueda que se han reanudado esta mañana con la participación de componentes del Servicio Marítimo y de los GEAS.
No se ha localizado más mercancía en el punto exacto en donde se detectó la entrada del piloto, ni rastro de que pudiera haberse desecho de más material salvo el encontrado en el interior de su chaleco. A pesar de los rastreos exhaustivos en este punto no ha habido nuevos resultados.
Los pases de droga a bordo de embarcaciones como motos de agua han marcado la tónica de este verano, aumentando su presencia debido al cierre de la frontera del Tarajal que anula cualquier posible incursión de la mercancía por el paso terrestre. Esto ha llevado a buscar alternativas y entre ellas está el mar, con amplias posibilidades para colar droga en Ceuta en pequeñas cantidades y en goteo. Esto es lo que se pretendía la pasada noche, pero la presencia de efectivos del Instituto Armado en la zona abortó cualquier operativo de mayor envergadura. Tampoco se pudo dar con quienes esperaban la recepción del hachís, debido a la actuación de los agentes.
La droga aprehendida queda recogida como hallazgo, siento trasladada a las dependencias de Sanidad para su análisis y posterior destrucción. Se investiga la autoría de este pase que ha quedado sin su cierre completo.