Las residencias de mayores se convirtieron durante el período de confinamiento y en las distintas fases de la desescalada en unos establecimientos totalmente cerrados, donde el objetivo primordial era que no se produjera ningún tipo de contagio en sus residentes y tampoco en sus empleados. Es un objetivo que, desde luego, se ha logrado porque no ha existido ni un solo positivo ni entre los mayores ni entre las personas que les cuidan. Así ha sido en la Residencia Nuestra Señora de África, Fundación Gerón y Cruz Blanca.
El propio consejero de Sanidad, Consumo y Gobernación, Javier Guerrero, se muestra muy satisfecho por el papel que se ha desarrollado y entiende que ha llegado el momento de comenzar a abrir las mismas. A lo largo de todo este tiempo han tenido encima la supervisión de los propios responsables del departamento autonómico y ,aunque los mismos continuarán para prevenir cualquier posible contagio, al igual que sucede en otros sectores y más con la caída del Estado de Alarma a partir de este domingo, se deja en manos de los directores de cada uno de los centros la organización interna.
De esta manera, está previsto que los mayores puedan salir a la calle para la realización de paseos y que tengan la posibilidad de estar al aire libre una serie de horas cada día. Es una organización que dependerá de cada uno de los centros y se harán con todas las prevenciones posibles. Cada uno de los residentes utilizarán las mascarillas FFP mientras que en el interior de los establecimientos utilizan las quirúrgicas.
Por otro lado, una cuestión esencial es también los permisos para la posibilidad de nuevos ingresos. Para ello está previsto solicitar que cada uno de los mayores que vaya ser nuevo residente en cualquier de las tres residencias deberá presentar documentación que demuestre que está totalmente libre del coronavirus. Para ello, se exigirá la realización de un PCR veinticuatro horas antes de la autorización del mencionado ingreso.
Sobre este particular se está trabajando en una serie de protocolos entre la Consejería de Sanidad y el Ingesa para preparar las pruebas que deberán realizarse estas personas para los traslados desde el hospital a las residencias o de los domicilios particulares a las mencionadas residencias.