Muchos de los ciudadanos cumplen como es debido el Estado de Alarma que decretó el Gobierno central y siguen confinados en sus casas y cumpliendo con las medidas de prevención para evitar que se propague el COVID-19. El problema está en las personas que quieren vivir fuera de la ley y, a pesar de las advertencias de las distintas autoridades para que cumplan con los requisitos, hacen caso omiso. Por ello la Policía está trabajando a destajo para que se puedan cumplir con las órdenes. En pleno Estado de Alarma y con el comienzo de la desescalada preocupa que se empiecen a incumplir las distintas normas y eso provoque una propagación del virus que nos hiciera retroceder en la evolución positiva de curados de la ciudad.
Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en coordinación con la Policía Local han impuesto 3.388 propuestas de sanción desde que se inició el estado de alarma el pasado 15 de marzo. Una cifra bastante alta para el estado en el que se encuentra el país y pone de manifiesto que muchas personas todavía no son conscientes de la gravedad del asunto. Se están tomando medidas duras para que se cumplan los requisitos y que no provoquen un riesgo en la ciudadanía que se mantiene respetuosa en su domicilio. Por otra parte, se eleva el número de detenidos a 44, una cifra que ya se conocía de día anteriores.
Las fuerzas de seguridad, por su parte, siguen con la labor de patrullar tanto en los vehículos como a pie por las distintas calles de nuestra ciudad. Además de tener distintos controles en puntos estratégicos y donde se le requiere a las personas el papel que especifique su salida. Queda todavía un largo camino por recorrer y ahora que se abre la veda para poder realizar distintas actividades es cuando más precavida tiene que ser la ciudadanía.