Casi una decena de hombres y mujeres ha fallecido en los últimos años en la línea del infierno, la que une Marruecos con Ceuta para alimentar el negocio del porteo. La última fallecida ha sido Fatima. Deja cinco hijos y su muerte ha ocurrido mientras esperaba la cola, con su carrito. Sufrió varias lesiones, las más graves en la cabeza, cuando se acercó a la zona rocosa y terminó despeñándose.
Su muerte tiñe otra vez de luto el paso de mercancías y es lamentado por las mujeres que, como Fatima, hacían cola en la mañana de este miércoles para buscar su sustento portando bultos.
“Ella se dio la vuelta y ha caído. Estaba en la fila con nosotras, cayó encima de una piedra. Han venido muchas autoridades y la taparon con una manta. Tenía 5 hijos. Estaba en la fila, la pobre… que Dios la bendiga. Solo venía de vez en cuando, no todos los días. No tenía para comer”, explica una compañera, en las naves del Tarajal, testigo de lo ocurrido a las cámaras de FaroTV.
Pero aunque la muerte sea dura, aunque hayan visto cómo se va una compañera, las condiciones de vida son tan complicadas en Marruecos, que decenas de mujeres han tenido que cumplir con su rutina, olvidando la tragedia de la que han sido testigos en el paso.
La muerte de Fatima forma parte de las denuncias hechas desde hace muchos años por oenegés marroquíes y españolas, unidas en la reclamación de derechos y mejoras para quienes son víctimas de un tráfico tercermundista, en el que la dignidad se pierde a golpe de impacto.
Han muerto ya tantos hombres y mujeres, que pierden la cuenta. Víctimas de aplastamientos, de caídas o de infartos… las largas colas, las esperas, la tensión que rodea el entorno fronterizo convierten toda esta situación en algo inhumano. El cadáver de Fatima se encuentra en el Hospital de Tetuán. Allí se tendrá que hacer la autopsia antes de autorizar su entierro. Sus familiares y amigos lloran ya otra muerte vinculada al mundo del porteo.
APDHA reclama medidas
La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA) se declara "testigo" de los efectos de unas políticas migratorias que cada año "se cobran demasiadas vidas" y a otras tantas se las “roba' poco a poco", como en el caso de las porteadoras. Desde el 2012 no sólo vienen reclamando algunas medidas que son "básicas y totalmente asumibles", como la de zonas de baños, agua potable y descanso -entre otras- que "dignificarían" las condiciones en las que ejercen su trabajo. La entidad también ha denunciado en este tiempo la "violencia estructural" a las que son sometidas las porteadoras y que es la "verdadera" causante de estas muertes.
"Fátima ha perdido la vida, como tantas otras porteadoras. Principalmente, porque no existe una voluntariedad del Estado español en reconocer la actividad laboral que desempeñan las porteadoras, y por ende, la inexistencia de esta alegalidad no provocaría que estas mujeres tengan que esperar desde la madrugada bajo todo tipo de adversidades, en el otro lado de la frontera, para garantizar su supervivencia y la de sus familiares", ha asegurado Ana Rosado, miembro del área de Solidaridad Internacional de la APDHA.
"Fátima ha perdido la vida, principalmente, porque no existe una voluntariedad del Estado español en reconocer la actividad laboral que desempeñan las porteadoras"
Sin obviar, que esto ha pasado, a su juicio, porque ambos gobiernos "no mantienen" un diálogo bilateral en el que sitúen a las porteadoras como una situación prioritaria, sino que sus conversaciones "se centran" en control de flujos migratorios y "no" en el respeto a los derechos humanos.
Desde APDHA avanzan que seguirán denunciando que los gobiernos, "que son los encargados de garantizar los derechos humanos", siguen realizando una gestión "irresponsable" de la frontera y esta se traduce en unas prácticas que se "ceban" sobre todo con mujeres "racializadas, empobrecidas socioeconómicamente y vulnerabilizadas".
Nadie tiene la culpa de lo que ocurre, solo los que lo permiten y ademas luego ni se inmutan, D.E.P. y los que pagaran las consecuencias, seran sus hijos,que se han quedado sin la madre que las daba algo e comer, que ministro ha salido a la palestra para hacerse cargo de esos ninos,
Desde luego los marroquis qie son los que deberían no
Muere en el lado marroquí pero como siempre la culpa es de España
Y mientras Mohamed VI "el flaco" viajando por el mundo y comprando yates de 80 millones de euros.
Lamento profundamente la muerte de esta señora, que ademas deja cinco huérfanos y sabe Dios que se va ser de ellos. Marruecos tiene y debe harcer algo urgente al respecto. Es incomprensible como estas personas puedan aguardar hasta tres diás en una brutal cola, para poder llevar 200 o lo sumo 300 dirhams a casa. Repito, lamentable pata un país con multitúd de recursos naturales que posee.
La culpa es nuestra o mía , seguramente!!! D.E.P. Están acabando con todo en este País.