Denuncian que la antigua prisión de Los Rosales está abandonada. Lo denuncian ahora y lo llevan denunciando meses y meses sin que nadie les haga caso. Son los vecinos de las barriadas Poblado Regulares, Narváez Alonso y Claudio Vázquez, que viven con temor el incendio ocurrido en la madrugada del domingo en la vieja penitenciaría. No saben qué tiene que pasar más para que los responsables actúen y clausuren de verdad ese centro hasta que se le dé uso.
Y es que ahora ha sido un incendio provocado, pero ha habido ‘okupas’, consumo de drogas, han desvalijado el interior de las antiguas celdas... Y todo porque los responsables no ponen remedio y permiten que la vieja cárcel esté sin vigilancia, sin control y a sabiendas de que hay personas que entran y salen.
“El 9 de enero de este mismo año denunciamos el saqueo que se estaba produciendo y que la puerta permanecía abierta de par en par”, denuncian. “Advertimos a los niños del barrio que eviten jugar por la zona porque puede pasar una desgracia”, añaden.
Lo que puede ocurrir dentro nadie lo sabe, y eso genera inquietud. “Lo que pasa o puede pasar detrás de esos muros nadie del exterior se entera”, advierten. Sí es cierto que cuando los vecinos han alertado al 112 han venido patrullas de la Policía que incluso han sacado gente del interior, pero los residentes de las barriadas cercanas quieren tranquilidad y quieren que se termine con el agobio que tienen al saber que en esas instalaciones puede suceder cualquier cosa. Si de madrugada fue el incendio, ¿quién no dice que puede haber peleas graves con los grupos que se cuelan dentro?
Propuestas plenarias
Tampoco entienden por qué no han salido adelante propuestas plenarias que pedían dotar de algún fin a estas viejas instalaciones. En noviembre de 2018 el Pleno admitió la propuesta de Caballas de hacer un centro educativo en la cárcel, los vecinos se preguntan qué pasó con esa decisión.
Actualmente la que fue la cárcel operativa más antigua de todo el país no tiene utilidad alguna, en noviembre de 2017 se hizo el traslado de todos los presos a la de Mendizábal y tras supuestamente vaciarla quedó con vigilancia unas semanas. De ahí al abandono. Comenzaron las entradas de intrusos, los saqueos, el intercambio de drogas... de hecho el interior está completamente destrozado. Pero nadie actúa a pesar de que se han publicado reportajes sobre este asunto, la dejación es absoluta.
Los vecinos tienen miedo sobre todo después de lo sucedido la pasada madrugada. Quieren que se actúe con celeridad porque sucesos así pueden repetirse, además de que tenerla abierta y sin vigilancia puede provocar accidentes entre niños de los barrios que quieran colarse a jugar en su interior.
Una hora para sofocar las llamas en la prisión
No por habituales, dejan de sorprender las noches con varias intervenciones de Bomberos: rastrojos, contenedores, vehículos… La pasada madrugada, a los que podríamos denominar ‘tradicionales’ incendios de rastrojos, se sumó un fuego en el interior de la antigua prisión de Los Rosales, presumiblemente provocado, al que los efectivos del Servicio de Extinción de Incendios y Emergencias (SEIS) tuvieron que dedicar casi hora y media de trabajo. El servicio se puso en marcha a poco más de medianoche y regresaron al Parque de Bomberos casi a la una y media de la madrugada. El turno de noche comenzaba a sofocar llamas a las once de la noche, primero rastrojos, y media hora más tarde, contenedores en Loma Margarita. La zona ha sido objeto de actos vandálicos de este tipo en varias ocasiones recientemente. A las 04:30 horas llegaba un nuevo aviso. Otra vez estaban en llamas los rastrojos de la zona de Loma Colmenar. Hasta el lugar, el protocolo de actuación establece que las unidades de Bomberos deben ir acompañadas de la policía para evitar incidentes como los apedreamientos que han sufrido los efectivos del SEIS en demasiadas ocasiones.