La reforma y modernización de los muros fronterizos entre España y Marruecos fue uno de los compromisos que les manifestó el pasado diciembre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a los presidentes de Ceuta y de Melilla, Juan Jesús Vivas y Juan José Imbroda, durante su encuentro en el Palacio de la Moncloa. Sánchez dio cuenta de la implicación del Ejecutivo en un proyecto global de refuerzo y modernización del perímetro, cuyos primeros pasos no se han hecho esperar, como bien publicó ayer el Boletín Oficial del Estado.
Así, se ha encargado a la Sociedad Mercantil Estatal Ingeniera de Sistemas para la Defensa de España (Isdefe) que elabore dicha propuesta de modernización, que se centra en la mejora de las instalaciones de los puestos fronterizos y en el incremento de recursos humanos, y por el que recibirá para este primer estudio preliminar 71.747 euros procedentes de los presupuestos de Interior de 2018 y 2019.
La Isdefe asume dos encargos. El primero, llamado ‘paquete 1’, para el que tenía el plazo de un mes que concluyó a mediados de diciembre, contempla el “diagnóstico de la situación actual e identificación de los tramos de actuación” y que engloba cinco puntos: estudio de la situación actual de las infraestructuras perimetrales de Ceuta y de Melilla; evaluación de la documentación existente sobre los sistemas de vigilancia; identificación de los tramos más vulnerables sobre los que acometer la reforma y modernización, atendiendo a los asaltos o intentos de asalto registrados durante los años 2017 y 2018; estudios topográficos; y delimitación de los tramos de intervención.
Por su parte, en el que se ha llamado ‘paquete 2’ la empresa dispone de un plazo de dos meses, previsto a concluir a mediados de febrero. Un período que se ha establecido para presentar “alternativas a los sistemas que atiendan a soluciones presentes en el mercado”.
Defensa ha matizado que la prioridad es reforzar “la seguridad y eficacia”, así como la “modernización” de los vallados. El contrato con Isdefe se limita a un estudio técnico que incluya el diagnóstico de la situación actual de los perímetros y la identificación de los tramos de actuación, teniendo en cuenta los puntos más vulnerables según la frecuencia de los asaltos registrados.
No obstante, el Gobierno ha puesto el acento en que “ no se trata de una solución sencilla” debido a la obsolescencia de las vallas y el deterioro que presentan. Unos daños que responden a su situación en el exterior y a los continuos asaltos que padecen. Aunque insiste en que la eliminación de las concertinas sigue siendo un “compromiso firme” de su Administración.
Y en extranjería de Ceuta no funciona nada, ni el teléfono, ni la cita previa, ni tienen recursos suficientes para poder gestionar la regularización de las trabajadoras transfronterizas. Vamos, todo un éxito de la Delegada del Gobierno en Ceuta. Y mientras tanto la Policía Nacional no deja pasar a las trabajadoras ni para poder cobrar su sueldo.