La Policía Nacional ha detenido a una pareja, hombre y mujer, por su relación con robos continuados de teléfonos móviles de última generación, tipo smartphones, para lo que hacían uso de un método sofisticado para que nadie pudiera localizarles y abortar el negocio que tenían montado, causando graves perjuicios al establecimiento comercial en el que actuaban.
Así, para desactivar los sistemas específicos de alarma, usaban una llave falsa con la que abrían la caja de plástico de seguridad. Empezaban por coger el producto de la estantería y se dirigían a una zona del local no cubierto por las cámaras de seguridad. Allí extraían el terminal de su caja y la devolvían vacía a la estantería. Tomaban meticulosas medidas de seguridad para no ser detectados.
Tras las vigilancias continuadas establecidas por la Policía, pudieron identificar a la pareja que se encarga de hacer estos robos, procediendo a su detención en plena plaza de Azcárate, acusados de un delito de robo con fuerza. Son un hombre y una mujer y resulta que el varón tenía una orden europea de detención cursada por Italia por un delito contra la salud pública, así que tendrá que ser extraditado a este país.