El 'primer equipo' de la ciudad, el Ceuta, con todas las letras por delante y por detrás que quieran ponerle, es el equipo de fútbol de Ceuta, el que juega en el Murube. Hace un par de años Luhay Hamido se hacía cargo de la presidencia de la entidad blanca y nadie podrá negarle que ha cumplido las promesas que hizo allá por el mes de mayo de 2016, en su presentación ante los medios de comunicación como máximo dirigente de la entidad blanca, manteniendo una base importante de jugadores locales, y reforzando el trabajo de la base. Pero sobre todo poniendo al Ceuta en su sitio, a nivel deportivo.
La primera temporada fue de transición, cambiando todo aquello que fue necesario para que el club, y a la postre el equipo, funcionara como un club, subsanando temas que fueron saliendo. Uno de los primeros aciertos, sin duda, fue la contratación de Juan Ramón quien reactivó al equipo al inicio de la segunda vuelta de la temporada 16-17 y la confianza en el técnico es tal que sigue siendo el entrenador del Ceuta dos campañas después.
Pero aquellos 56 puntos y una octava posición no fueron suficientes, y la apuesta por el equipo se incrementó. Llegaron caras nuevas, con ambición y compromiso, y el equipo estuvo peleando por el ascenso hasta el penúltimo momento.
Un sueño del que les apeó el Orihuela y que supuso un gran esfuerzo para el club. Pero no sólo eso. Para su presidente Luhay Hamido ha supuesto un momento de crecimiento personal: “a nivel emocional ha sido una experiencia vital, como a nivel de crecimiento personal”. Pero en lo deportivo, ha supuesto: “un esfuerzo tremendo. Ha sido una apuesta arriesgada que al final no acabó como a nosotros nos hubiera gustado, que era con el ascenso”. Pero pese a este objetivo no obtenido, Hamido asegura que se ha conseguido algo más importante: “se ha removido un sentimiento en una afición que estaba muerta y que parece que está despertando”.
Ahora toca ponerse de nuevo el mono de trabajo y confeccionar otra plantilla para, como poco, volver a estar entre los cuatro primeros clasificados y disputar esas eliminatorias de ascenso a la ansiada Segunda B: “trabajo y sacrificio, no queda otra, para apostar fuerte otra vez para conseguir ese ansiado ascenso que nos lo merecemos todos, los que trabajamos por ello, nuestras familias porque están detrás apoyándonos, y la Ciudad”.
Pero las 'ayudas' para conseguir el objetivo son las que son. Una subvención de 175.000 euros para el ejercicio 2018 más un bonus de 30 mil euros por jugar las eliminatorias, y la venta de abonos y entradas, que si bien se elevaron de forma cuantitativa no son excesivas. Hamido es consciente de que: “la Ciudad hace lo que puede y ojalá este año pueda seguir ayudándonos e incluso hacer un esfuerzo mayor”.
La razón de esperar una mayor cuantía en la subvención municipal para el club blanco no es otra que el esfuerzo económico que está asumiendo la junta directiva: “nosotros hemos asumido casi el cincuenta por ciento del presupuesto total, y con lo que generamos nosotros solos es difícil afrontarlo”. La falta de acuerdos publicitarios, los precios de los abonos, a los que Luhay denomina 'simbólicos': “a sólo tres euros sale la entrada, con el abono, de cada partido de la temporada en tribuna, y a uno en gol, así que el resto hay que ponerlo de nuestros bolsillos”. Un problema económico al que hay que sumar que siempre desde Ceuta todo es más difícil: “traer a los jugadores, el tema de la vivienda para ellos, todo se complica más”. Pero “con el amor que tenemos por Ceuta seguimos con mucha ilusión”.
Y parece que el trabajo bien hecho ha dado sus frutos, al menos en cuanto a la relación institucional y club se refiere. El pasado jueves, la directiva de la AD Ceuta mantenía una reunión con Emilio Carreira, que Luhay calificó de ‘productiva’ y en la que la entidad blanca percibió un cambio significativo en la percepción que el ejecutivo de la Ciudad tenía del club, un cambio “para bien” y que podría suponer un aumento en la partida presupuestaria destinada al Ceuta.
Una ilusión puesta en el esfuerzo por traer refuerzos a una plantilla en la que continuarán: Willy, Víctor González, Borja Romero, Jaime, Segura, Perita, Chakir, Ismael, Yunes, Aiman, Prieto (regresa tras cesión), Adil (regresa tras cesión), Dani Gallardo, Alberto Reina e Iván Villanueva.
Por el momento, el club se ha reforzado con:
- David Polaco, 28 años de Jerez de la Frontera. Su posición natural es mediocentro, aunque también puede jugar de central e incluso de lateral izquierdo. La temporada pasada se convirtió en el fichaje estrella del Xerez Deportivo en su retorno a la Tercera División.
- Fermín, portero de 25 años, procedente del Écija Balompié, con el que ha disputado 28 partidos esta temporada en Segunda B. Antes jugó en Segunda B en La Hoya Lorca y en Tercera en el CD Gerena. El fichaje de Fermín se confirmaba un día después de que Isi Jareño se despidiera en las redes sociales del conjunto blanco.
- David Castro, 29 años, un centrocampista organizador que llega procede del Écija Balompié, equipo que la pasada temporada militó en el grupo IV de la Segunda B tras conseguir el ascenso en la temporada 16-17, y por quien ya el Ceuta se interesó.
- Dani Guerrero, delantero sub-23 que procede del Chiclana Industrial, equipo de la División de Honor Andaluza, con el que ha marcado 18 goles. El chiclanero tiene experiencia en Tercera con el Cádiz B y Conil.
- Juanito, coriano de 24 años procedente del Alcobendas Sport, equipo al que llegó en diciembre tras desvincularse del Écija. Juanito, en el equipo azulino, ascendió a Segunda B en la temporada 16-17.
Y como no, el ‘pichichi’ se queda en casa. Un “bombazo” como lo anunciaba en redes sociales el propio club, la renovación para la próxima temporada de su máximo goleador en el pasado ejercicio, el menorquín David Camps. Según el club blanco, el pichichi, que logró 15 goles en el cuadro ceutí, “seguirá dando alegrías a la afición caballa”, ya que, “a pesar de todas las ofertas que tenía ha decidido continuar donde mejor le tratan”.
Si bien David Camps no debería contar como fichaje y sí como renovación, lo cierto es que desde el club lo destacan como un logro, dado el buen resultado que el menorquín dio el pasado ejercicio, con las 15 dianas obtenidas.
El propio Camps, en su cuenta de Instagram, el día de su renovación mostraba su satisfacción por continuar siendo una temporada más miembro de la familia caballa: “Estoy muy contento de vestir otro año más la camiseta del AD Ceuta FC. Este año va a ser el nuestro, con muchas ganas de empezar”.
El club también anunció la llegada de Adil Lebrun aunque finalmente se su contratación quedaría en agua de borrajas por una deuda del club con el que militó la pasada campaña, el Chabab Rif Al Hoceima, con el jugador franco-marroquí al que pretendía el conjunto blanco.
El objetivo del club que preside Hamido para la temporada que arrancará el último fin de semana de agosto ha sido el de mantener la base del equipo y reforzar esos puntos vitales.
Para cualquier equipo es fundamental tener un bloque compacto para conseguir el objetivo de luchar por el ascenso, pero requiere esfuerzo: “Dar continuidad al proyecto es fundamental y nos estamos reforzando bastante bien": Algo que está poniendo al Ceuta en las quinielas de las plazas de promoción al Ceuta”.
Pero lo de ir de favorito puede ser un arma de doble filo aseguró Luhay: “la condición de favorito te genera respeto ante los rivales, y es algo que es muy positivo, pero también supone una motivación extra para los equipos los que nos enfrentaremos a lo largo de una extensa temporada”. Ese punto se habrá de trabajar psicológicamente por parte del equipo técnico, que un año más comandará el astigitano Juan Ramón Martín, para no olvidar que: “todos los partidos van a ser muy complicados, que el grupo es aún más difícil con 22 equipos inscritos, y si no vamos con el trabajo bien hecho, humildad, sacrificio y compromiso no llegaremos a la meta que nos hemos propuesto para el final de la próxima temporada”.
Pero este proyecto ambicioso, en el que han implicado muchas personas y entidades públicas, no es nada sin la afición en las gradas del estadio Alfonso Murube, cada quince días: “al final, un club es tan grande como lo sea su afición", aseguró Hamido, algo que, desde la entidad a la que representamos, llevamos proclamando desde el minuto uno”.
Para conseguir ‘enganchar’ al aficionado, la directiva ha mantenido el precio de los abonos `para el presente ejercicio. Los carnés de Gol costarán 30 euros; los de Tribuna, 70; los de Palco, 120; y los de Palco VIP, 150. Precios muy asequibles para aquellos que disfruten con una tarde de domingo de fútbol en directo: “nosotros peleamos por ver una grada llena y por ello mantenemos esos precios simbólicos para los abonos y las entradas”.
Luhay Hamido confía que los buenos resultados y ese 'casi llegamos' empuje a la afición a acompañar este proyecto y a animar al equipo: “por los pocos, o muchos, que son nosotros vamos a seguir trabajando 'a muerte', como lo llevamos haciendo desde que nos hicimos cargo de este club”.
Rompiendo mitos: “Ni mío ni de nadie, de todos”
Mucho se especuló sobre la forma en la que la directiva que preside Luhay Hamido se hizo cargo de la AD Ceuta CF. Si compraron el club, y por cuánto; si no lo hicieron... Pero al margen de cálculos cabalísticos y pasados dos años, la realidad es la que es, al menos así lo ve Hamido, sobre todo después de la última reunión mantenida el pasado jueves con el consejero de Turismo y Deporte Emilio Carreira: “parece que hemos pasado el examen y todo el mundo empieza a entender que este es el Ceuta de los ceutíes. Ni mío ni de nadie. De todos. Gobierno, oposición, las cuatro culturas, la prensa, y por supuesto nuestra afición”.
Un mensaje muy significativo que deja entrever que el grupo de ceutíes que se hicieron cargo del club en 2016 han pasado malos momentos.
Ahora desde la entidad blanca se quieren dar por zanjadas todas las especulaciones y afrontar la nueva temporada con la máxima ilusión. Un proyecto para el que ya empezaron a trabajar antes incluso de finalizar su andadura en la fase de promoción de ascenso a Segunda B: “nuevos retos, nuevos proyectos, pero con la misma ilusión del primer día”, afirmó Hamido.
Apoyo institucional: “Dar las gracias”
Para que un proyecto ambicioso, con el objetivo del ascenso a Segunda División B, un club necesita muchos apoyos, sobre todo económicos, que parece se van a incrementar esta campaña. La implicación de las empresas en el ámbito deportivo, por medio de contratos publicitarios en Ceuta es mínima.
El número de abonados que tiene el club no son suficientes para hacer frente a una plantilla competitiva que afronte el reto del ascenso con garantías como quiere la afición. Por ello, para la junta directiva del Ceuta, los apoyos institucionales son tan importantes y el presidente de la entidad blanca Luhay Hamido ha querido mostrar su agradecimiento a las instituciones locales.