La magistrada del Juzgado de lo Penal número uno dictó ayer la sentencia absolutoria de J.M. y G.D. por un delito de falsedad, por el que ambos se negaron a declarar. Ello, unido a la ausencia de testigos citados a la vista, derivó en la absolución de los acusados.
Los hechos por los que se sentaron en el banquillo tuvieron lugar el 17 de diciembre de 2012. Puestos de común acuerdo, ambos rellenaron un impreso de alta de luz para la vivienda de G.D., a nombre de una tercera persona, cuya firma y demás datos personales falsificaron, además de presentar una fotocopia de su DNI, sin que este último hubiera dado su consentimiento.
De haber sido declarados culpables, hubieran cumplido una condena de dos años de prisión y pagado una multa de 2.700 euros cada uno de ellos.