Cerca de un año llevan las 40 plazas del Auditorio del Revellín inutilizables y, más allá del pésimo estado en el que se encuentran, han impedido en el transcurso del curso cultural poder ofertar dichas localidades al público. Esta situación la confirmaba la Consejería al comienzo de la temporada, desde donde aseguraban que la técnico tenía conocimiento del mismo pero que, sin embargo, los trabajos de reparación no se podían acometer hasta el parón de la programación.
Las intenciones manifiestas de Cultura se dirigían a la elaboración de un informe de las zonas afectadas para poder solventar el problema “cuanto antes”, sin embargo, dichas butacas, concentradas en una zona concreta, continúan ocho meses más tarde en las mismas circunstancias. En concreto los asientos se sitúan en las plateas laterales y son todos aquellos dispuestos junto a las barandillas. Los daños afectan, en todos ellos, a la parte del asiento cuyo aspecto sugiere como si hubiese sido arrancado. En la Consejería desconocen la causa o suceso que desencadenó la situación actual de estas butacas, ni confirman que se vayan a adoptar medidas de seguridad más firmes en el interior del auditorio para prevenir hechos similares.
Actualmente son dos los guardias de seguridad que se sitúan en el acceso al edificio, aunque no suelen transitar el interior de la sala ni los palcos. No obstante son las azafatas, como personal acreditado para estar en la sala, las que se encargan de velar para que se respeten las normas, tales como no poder comer ni beber en su interior.
Aforo reducido a 580 plazas
Con estas casi 40 plazas menos el aforo se ha visto reducido a 580 plazas de las 621 butacas disponibles y, en concreto, de las pertenecientes a los 193 de los palcos. Con ello se han visto perjudicadas algunas obras de teatro que en los últimos meses han completado aforo y de las cuales los usuarios a través de las redes sociales solicitaban que se ampliara a otra sesión tras no haber podido conseguir una entrada. Obras tales como ‘Prefiero que seamos amigos’ o las exhibiciones de fin de curso de las escuelas de danza, que llegan todas con las entradas agotadas. Con estas 40 plazas se ha menoscabado la oportunidad de asistir a un grueso de población y, a su vez, merman la capacidad de recaudación del propio teatro.
Si la Consejería de Cultura desconoce la causa o suceso que desencadenó la situación de las mencionadas butacas, no es muy difícil encontrar el motivo: por desgracia hay mucho cafre suelto que tienen de todo menos educación y Cultura. Poco se puede esperar de quienes tienen este comportamiento, y la verdad no entiendo que pintan asistiendo a un auditorio, cuando donde mejor estarían es en un corral de vacas o junto a una para de cerdo, allí estarían bien a gusto.
PA CUANDO SE LIBRARA UN PUÑAO MU GRANDE DE LEUROS PA ARREGLA TO LO DESTROZAO POR EL PUEBLO EDUCADO QUE ACUDE A ESTE BOQUETE.
SEÑORES TO ES CUESTION DE LEUROS.
de la foto acudimos a archivo,pa no gasta carrete.(no reirse es un tema mu serio)
El auditorio del Revellin no puede estar "para todo". El Gobierno comento que se podría volver a utilizar la sala-salon de actos del instituto 7 colinas para descongestionar el auditorio del Revellin. La pregunta es por qué no se hace. Pues como todo lo que hace este gobierno : hablar mucho y hacer poco. Ni se arreglan las butacas del Revellin ni se recurre al salon de actos del 7 colinas para actos por ejemplo de dedicado a escolares......Inoperancia, ineptitud, inacción, digo y no hago = gobierno del PP.
La foto no es del auditorio del Revellin, por qué acompaña a la noticia? Se hace a posta o no se sabe......?