El Gobierno afirma que no se resentiría la recaudación porque se cobrara más tarde
Dentro de las negociaciones que vienen manteniendo desde la Ciudad Autónoma con los representantes de la Confederación de Empresarios y de la Cámara de Comercio, una de las peticiones que han puesto encima de la mesa los propios dirigentes empresariales es que tengan las oportunidad de alargar el plazo de pago de sus importaciones.
En estos momentos, las mercancías que llegan a nuestra ciudad cuentan con un plazo de 90 días para que el empresario pueda saldar su deuda con el organismo autónomo Servicios Tributarios o bien, también se puede llegar al acuerdo de un fraccionamiento acordado igualmente con este organismo y que es una fórmula que se ha empleado en muchas ocasiones.
Hasta ahora mismo el tiempo de abono del IPSI importación son los 90 días
Ante la situación que se vive, en estos momentos, de un continuo descenso del IPSI, que se ha ido alargando en los dos primeros meses del año, resulta que nos encontramos con que los empresarios han pedido que sea posible abonar a los seis meses, es decir, duplicar hasta los ciento ochenta días.
Desde ese punto de vista, se le preguntó a la consejera de Hacienda, Economía, Administración Pública y Empleo, si a la Ciudad la toma de una decisión de esas características sería un verdadero problema, puesto que no ingresaría a los tres meses, sino a los seis.
Explica la consejera que, en todo caso, tendrían una pequeña tirantez, pero que podrían aguantar, porque la recaudación no se resiente, simplemente, que se va a cobrar más tarde. No existirían más problemas.