Ante la cancelación de rutas, algunos han tenido que pasar la noche en un hotel e incluso en el Puerto
El temporal Ana se ha hecho notar en Ceuta, aunque el Puerto de la Ciudad Autónoma no ha sido el único que ha dejado imágenes de desesperación -con la situación de los Erasmus de Córdoba como la más simbólica- y en Algeciras ha ocurrido lo mismo.
Cancelaciones a última hora de la tarde del domingo y a primera hora de la mañana
A lo largo de la tarde del domingo el Puerto de Ceuta advertía a los pasajeros de los previsibles cambios de horarios y probables cancelaciones. Algunos fueron precabidos y otros no corrieron la misma suerte.
A partir de las 22 horas comenzó el caos. La mayoría de travesías en dirección a Ceuta fueron canceladas. Balearia, por seguridad, zarpó pasadas las diez de la noche -el horario inicial era a las 21:45- en lo que sería su última salida en las siguientes 12 horas.
A las personas que querían volver a Ceuta después del puente se sumaron los grupos que regresaban de sus citas a lo largo de la geografía española, sin capacidad de reacción.
La selección ceutí no llega a tiempo
Venían de vuelta de Madrid tras quedar eliminados de la Copa Regiones UEFA, pero a la mitad de camino recibieron el aviso: no llegarían a tiempo. La selección de fútbol senior ceutí tuvo que alojarse en un hotel de Algeciras.
Un regreso no esperado del Betis-Atlético
Las peñas de fútbol del Atlético de Madrid y Real Betis Balompié viajaron a Sevilla para disfrutar del partido. Sin embargo, de vuelta se llevaron la sorpresa: llegaron justos de tiempo y, a pesar de que compraron un billete para el último barco de Balearia, no embarcaron por unos minutos.
"No es normal", manifestaba uno de los aficionados en la mañana del lunes, a punto de coger el primer ferry de Balearia tras la tormenta. Algunos de sus compañeros de viaje consiguieron embarcar. Ellos no, por unos minutos y por seguridad, por lo que han tenido que dormir en un hotel, cuyos gastos en un primer momento no entraban en sus planes.
Ello no borraba la sonrisa de su cara. Al menos habían ganado. Los béticos, en cambio, no tenían motivos para hacerlo: ni por lo ocurrido en el Puerto ni en la ciudad hispalense.
Llamadas al trabajo
A primera hora de la mañana muchos de los trabajadores no estaban en su puesto de trabajo. Más allá de la 'cuesta arriba' que supone el regreso tras el puente, estaban obligados.
Algunos tenían el primero de la mañana del lunes, a las 6, pero tuvieron que esperar como mínimo a las 11:30, cuando el baro de Transmediterránea fue el primero en zarpar. A partir de entonces, normalidad, pero los horarios laborales de media Ceuta estaban trastocados.
Los más jóvenes habían seguido desde la noche anterior lo ocurrido a través de Internet y, previsores, llegaron un poco más tarde al Puerto.
La flexibilidad de horarios -los billetes pueden ser cambiados hasta 365 días más tarde- ayuda a rectificar en este tipo de situaciones las rutas de los que regresaban a Ceuta.
Varios militares aprovecharon una residencia militar de Algeciras para pasar la noche. Otros llegaron a primera hora de la mañana al Puerto de Ceuta a la espera de novedades.
Hacia Tánger
Además, ante la cancelación a lo largo de la mañana de los trasportes marítimos hacia Tánger, Ceuta se convirtió en la alternativa para llegar a la ciudad marroquí.
Ante la incertidumbre que acechaba a la ruta Algeciras-Tánger a lo largo de la mañana, muchos optaron por aprovechar los primeros barcos hacia Ceuta para después cruzar la frontera.
