Prana signifca energía. Energía cósmica, energía individual, energía intelectual: todas ellas son prana. El prana es universal. Impregna a cada individuo así como al universo a todos los niveles.
Todo cuanto vibra es prana: calor, luz, gravedad, vigor, potencia, vitalidad, aliento y espíritu; son todas formas de prana. Prana la energía vial es el eje de la vida.
Prana y consciencia se hallan en contacto constantemente entre sí. En los textos de yoga se dice que en tanto la respiración está en calma, prana está en calma. Los antiguos yoguis de la India abogaron por la práctica de Pranayama, que es el corazón del yoga, sabiendo la conexión entre la respiración y la consciencia.
Muchas son las personas que respiran incorrectamente sin darse cuenta que de la calidad de la respiración depende la calidad de la vida o que, una pobre respiración genera una pobre vida. Si reflexionamos que podemos estar 3 días sin beber, 30 ó 40 días sin comer, 3 días sin dormir pero ni dos minutos sin respirar, comprenderemos la importancia vital que la respiración cumple en el proceso de la vida.
Todo ser vivo respira. El aire es el principal elemento natural que la célula precisa para vivir, el principal alimento y fuente de vida y energía del ser humano, sin el cual, perecería. Nacemos con la primera inspiración y vivimos mientras sigamos respirando, así de sencillo. La vida, en su manifestación física, no es más que un proceso ininterrumpido de respiraciones, que culmina con el último suspiro. Un intercambio constante y equilibrado del oxígeno y el dióxido de carbono.
La respiración es la fuente de todo el poder humano. Los yoguis afirman que con el hábito de la correcta respiración, la raza humana se regeneraría, haciendo que muchas enfermedades desaparecieran de la faz de la tierra.
La regulación correcta de la respiración aporta salud y bienestar general, al permitir la purificación de la sangre y la eliminación de las toxinas, que de lo contrario, envenenaría todo el sistema, poniendo la salud y la propia vida en peligro.
Para prevenirlo, es urgente aprender a respirar de forma natural, como lo hacíamos de bebés. Moviendo el abdomen y por la nariz.
Existen nombres en sánscrito para dominar a las fases de la respiración. Son las siguientes: Inspiración (Puraka); retención con los pulmones llenos (Antar Kumbhaka); espiración (Rechaka) y retención con los pulmones vacíos (Bahir Kumbhaka).
Pranayama es el vínculo entre los organismos fisiológico y espiritual del hombre. Así como el calor físico es el eje de nuestra vida, el pranayama es el eje del yoga. En el Hatha Yoga Pradipika (importante texto yoguico) se afirma que donde hay mente hay respiración y donde hay respiración hay mente. Si podemos controlar la respiración, podemos controlar la mente y viceversa; por lo que deberíamos aprender a hacer rítmica nuestra respiración a través del pranayama. Pero estas técnicas han de ser practicadas con la debida cautela y bajo la supervisión de un profesor.
El pranayama se halla en la frontera entre los mundos material y espiritual, siendo el diafragma el punto de encuentro del cuerpo físico y espiritual. La práctica de pranayama despeja las nubes del cerebro para así iluminarnos y aportar claridad y frescura a nuestra mente y espíritu.
Al inspirar, el yo-verdadero entra en contacto con el cuerpo. Por eso la inspiración es la evolución del alma hacia el cuerpo: el aliento cósmico espiritual que entra en contacto con el aliento individual.
La espiración, desde el punto de vista de la salud física, es la eliminación de las toxinas del organismo. Desde el punto de vista psicológico, aquieta la mente. Desde el punto de vista espiritual, se trata del aliento individual de la persona que entra en contacto con el aliento cósmico externo a fin de que ambos se fundan en uno.
La espiración es el abandono de nuestro ego. No solo se trata de una expulsión de aire, sino de la expulsión de nuestro ego en forma de aire. En la espiración nos volvemos humildes, mientras que con la inspiración sobreviene el orgullo.
Muchos de los problemas de ansiedad y estrés son derivados de una mala respiración, con el pranayama aprendemos a respirar más y mejor, de forma exclusiva por las fosas nasales. Existes respiraciones relajantes, y que nos sacan del letargo. En la Academia Premier donde imparto clases de yoga, los alumnos reciben un cuidadoso entrenamiento en técnicas de respiración.
El pranayama es un arte inseparable del yoga que posee técnicas para hacer que los órganos respiratorios se muevan y ensanchen a voluntad, de forma rítmica e intensa. Consiste en un largo y sutil flujo sostenido de la inspiración (puraka), la espiración (rechaka) y la retención de la respiración (kumbhaka). Puraka estimula el organismo; rechaka arroja fuera el aire viciado y las toxinas; kumbhaka distribuye la energía a través del cuerpo. Esta respiración disciplinada ayuda a que la mente se concentre y permite que el practicante de yoga tenga una buena salud física y mental.