Mientras que se celebraba el Día del Emprendedor en Ceuta, asistía a la conversación que mantenían dos profesionales del Derecho, en la que uno le decía al otro, que cada vez se alegraba más de no haber aprobado una oposición, después de ver los recortes de salarios que se iban a producir. El otro le respondía que él prefería cobrar unos euros menos por la crisis, pero cobrar todos los meses. Estos son algunos de los sentimientos encontrados que hay sobre la crisis económica.
Sin embargo, ante tanta noticia negativa, que una serie de personas se reúnan en torno a una convocatoria como la del Día del Emprendedor, parece traer aires frescos a un ambiente que, conforme pasan los días, se hace más irrespirable. Además se presentaban los resultados de la encuesta del proyecto GEM, que poniéndolos en comparación con los de años anteriores, podían ser de interés para analizar la evolución de nuestra economía, nacional y local.
Como ya se ha dicho en ocasiones anteriores, se denomina emprendedor o emprendedora a aquella persona que identifica una oportunidad determinada y organiza los recursos para ponerla en marcha. Como se reconoce por la propia Comisión Europea, el 'espíritu emprendedor' es un motor principal de la innovación, la competitividad y el crecimiento, pues representa un vehículo de desarrollo personal y de cohesión social. Fruto de dicho interés, en 1999 surgió un grupo de investigación a nivel internacional, agrupado bajo el nombre de Proyecto GEM (Global Entrepreneurship Monitor), auspiciado por la London Business School y el Babson College, y en España por el Instituto de Empresa. Ceuta y Melilla llevan varios años incorporadas a dicho informe, de la mano de un grupo de profesores de la Universidad de Granada, algunos de ellos de nuestra ciudad.
Del análisis de este informe, poniéndolo en comparación con el que se presentara en 2007, resultan datos bastante significativos. Así la tasa total de actividad emprendedora entre la población de 18 a 64 años de Ceuta ha caído desde un 6,4% en dicho año, al 5% en 2009. Y aunque también ha caído este porcentaje a nivel nacional, dadas las cifras diferentes de las que se partía en ambos escenarios, el resultado nos estaría indicando que, desgraciadamente, el desarrollo económico de Ceuta cada vez está más deteriorado. Claro, a esta conclusión se llega si convenimos que la iniciativa empresarial es clave para la actividad económica.
Sin embargo, si pensamos en términos de la nueva realidad política, en Ceuta estaríamos muy bien, pues no olvidemos que, tanto Vivas, como Chacón, sentenciaron hace meses que Ceuta era la ciudad que mejor había resistido la crisis económica, dado su 'potente' sector público (más del 50% de su PIB).
Si seguimos descendiendo en detalle, como ya hiciéramos en 2007, se observa que el perfil masculino sigue siendo preponderante, como también ocurre a nivel nacional. Y si ahora atendemos a los motivos para montar una empresa, los que lo hacen en Ceuta por oportunidad siguen superando a la media nacional, y los que lo hacen por necesidad también siguen estando por debajo de esa media nacional, lo que evidenciaría que cada vez cala con mayor fuerza en la población ceutí el mensaje del gobierno local de que labrarse un 'puestecito' en la Administración pública es el mejor fuguro, pues no parece que haya otra explicación posible, ante las terribles tasas de paro de nuestra ciudad.
Sin embargo, hay algunos datos que han cambiado respecto a las razones para abandonar el negocio. Mientras que en 2007 en Ceuta abandonaban un 33,7% por falta de rentabilidad, frente a un 25,3% nacional, ahora las cifras se igualan más (37,6% en Ceuta, frente a un 30% nacional). Es decir, la crisis parece que influye más en el resto de España, precisamente porque dependemos más del sector público. Y también, abandonan menos emprendedores porque les salió un trabajo. En 2009 se baja al 7,3%, desde un 22,2%. Quizás sea que ya no quedan puestos en el Ayuntamiento para colocar a más amigos que vivían de pequeños negocios. O que están ya todos colocados.
En otras palabras, lo que estas cifras nos siguen indicando es que aquí la gente emprende por ganar más dinero, no por necesidad. Es decir, que aunque el tamaño y el aislamiento no deberían ser limitaciones para los emprendedores, como ya decíamos en 2007, en Ceuta, los que viven bien, no tienen interés por emprender, sino por obtener un puesto en la Administración, a ser posible en la Ciudad Autónoma; y los que viven mal, sólo tienen para sobrevivir.
Esta continúa siendo la triste realidad, que las autoridades no consiguen cambiar, a la luz de los datos que nos aportan las encuestas. Es decir, que parece que a los gobernantes les interesa seguir manteniendo el voto cautivo. Porque si no fuera así, la promoción de la actividad emprendedora sería algo más que repartir unas cuantas subvenciones, y organizar un Día del Emprendedor?