Cornetas, trompetas, chirimías y tambores retumbaron ayer por toda Melilla durante la celebración del Festival de Bandas de Guerra.
Éste fue uno de los actos programados con motivo del Día Internacional de las Fuerzas Armadas en Melilla. Las actividades se extienden a lo largo de la semana, pero ayer la atención se fijó exclusivamente en las unidades musicales de la Comandancia General de Melilla que tocaron juntas y por separado en un espectáculo militar muy aplaudido.
El público no pudo estar más entregado. El himno de los Caballeros Legionarios y su más famosa interpretación del tradicional ‘Novio de la muerte’ de la Banda del Tercio Gran Capitán comenzó a calentar las manos de los asistentes a la Plaza de Armas, en Melilla La Vieja. Una hilera de soldados bien formados y con paso firme en sus desfiles dieron paso a la entrada de la Banda de los Regulares. En su caso, entonaron su himno, así como una peculiar salve rociera y una versión simpática del pasodoble que popularizó Manolo Escobar ‘Que viva España’.
El acto fue presidido por el comandante General de Melilla, Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu, y contó con la presencia del presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda. El comienzo del acto lo dio un sorprendente estruendo causado por un cañozado al cielo que, también, fue el encargado de dar por finalizado el evento. Antes, como colofón, las distintas unidades musicales entonaron juntas el himno nacional.